Hay inadaptados sociales en todos los niveles. Créame, cuando le digo en todos los niveles, es en todos desde el más alto de los pinos hasta la más humilde y sencilla de las palmeras.
En las últimas horas la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), desechó como hojarasca vieja el “Plan B”, impulsado desde Palacio Nacional por el presidente Andrés Manuel López Obrador, un político que cuando fue el opositor sistemático cautivó las masas como lo hacen invariablemente las rosas rojas, con ese color intenso, que asombra.
Sin embargo, en el presente AMLO perdió su majestuosidad, lejos quedó aquel Peje ídolo de multitudes, hoy muchos de quienes lo idolatraron han perdido su encanto, no ven más al político como un hermoso rosal, no, hoy con el paso del tiempo y el marchito de su sexenio al aún presidente ya le llaman “la flor del pelicano”.
En el enorme jardín de México, la SCJN figura un majestuoso y erguido girasol; un poder con la capacidad de moverse y orientar sus decisiones, su estructura, organigrama y sus votos hacia lo justo socialmente hablando, y eso lo hace hasta hoy en la verdadera y única esperanza de México, porque la oposición está quebrada.
Y precisamente así de quebrada como están hasta hoy los partidos opositores, así dejó otro inadaptado social las palmas “cola de zorro”, que instaló el Ayuntamiento de Tampico en el Puente Peatonal de la Laguna del Carpintero, el pulmón natural más grande de Tamaulipas.
El fin de semana fue el tema de conversación, cómo era posible que un par de estultos jovenzuelos hicieran esos destrozos, en qué momento se le habría ocurrido y subirlo a sus redes sociales. Fueron el tema del día.
Pero, sabe una cosa, esos hechos vandálicos fueron capitalizados por Chucho Nader y su secretario de Servicios Públicos, José Schekaiban, porque más rápidos que un rayo de luz volvieron a regalarle a Tampico y sus visitantes enormes palmeras “cola de zorro”, todas las que fueron quebradas se sustituyeron manifestando un inquebrantable respaldo, una confianza ciega, una lealtad y hermanamiento que poco se puede encontrar en la clase política.
Diría Andrés Manuel: “hay una lanza política en contra de Pepe Schekaiban…”, esto parafraseando el cómo defendió al gobernador Américo Villarreal Anaya en relación a los problemas de inseguridad; el mismo mandatario federal dijo que “en política no hay casualidades”.
Si alguien mandó al chavo a quebrar, solamente consiguió el fortalecimiento público y si nadie lo envió y simplemente se le ocurrió hable con él, si lo ubica, acérquese, porque a ese paso va a terminar colgado de un puente y no sabrá de dónde le llegó el chiricuazo.
En la intimidad… ¿En qué consistirá el Plan C?
Cuidado México, mucho cuidado con lo que se callan, sobre todo ustedes los empresarios.
POR DAVID ED CASTELLANOS TERÁN
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