La elección del momento perfecto para la cena en Navidad es clave para crear un ambiente cálido y memorable. Elegir la mejor hora va a repercutir además en la salud de las personas, ya que el tiempo influye mucho en la debida digestión.
Para no terminar con malestares estomacales después de la Navidad, es mejor no cenar a las 12 de la noche, como acostumbran en muchas familias, puesto que se mezclan proteínas pesadas, carbohidratos, dulces y alcohol, lo que termina siendo un ‘boom’ para el estómago.
En una entrevista con El Comercio, la nutrióloga Sandy Vega, recomendó cenar entre las 20:00 y 21:00 horas, de tal manera que le dé tiempo al cuerpo de hacer la digestión y así no afectar el sistema digestivo, incluido el colon.
Armonía, para la cena en Navidad
Aunque no hay una hora universalmente «mejor» para cenar en Navidad, considerar algunos factores puede ayudar a optimizar la experiencia festiva.
Primero, es esencial tener en cuenta las tradiciones familiares y culturales. Para muchas personas, la cena navideña es un momento para reunirse con seres queridos, compartir risas y disfrutar de una comida deliciosa. En este sentido, la mejor hora para cenar podría ser aquella que se alinee con las costumbres arraigadas en la familia.
Otro aspecto a considerar es la logística del día. Muchas familias optan por cenar en la tarde-noche del 24 de diciembre, antes de la tradicional medianoche navideña. Esta elección permite disfrutar de la cena con calma, seguida de la apertura de regalos y la participación en otras actividades festivas.
La ambientación también desempeña un papel crucial. La magia de la Navidad se intensifica cuando la cena se sirve en un momento en el que las luces centelleantes del árbol de Navidad iluminan la habitación. Cenar a la luz de las velas o bajo la suave luz de las decoraciones navideñas puede agregar un toque especial a la ocasión.
Además, la elección de la hora puede depender del menú planificado. Algunas familias prefieren una cena más temprana para permitir que los sabores se asienten antes de los postres, mientras que otras optan por una cena tardía para disfrutar de la comida principal de manera más relajada.
En última instancia, la mejor hora para cenar en Navidad es aquella que refleje las preferencias y la dinámica únicas de cada familia. La Navidad es una época para la alegría y la unión, y la elección del momento perfecto para la cena contribuirá a crear recuerdos duraderos.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR