REYNOSA, TAMAULIPAS.- Para frenar el aumento de la violencia , la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) ha reforzado su presencia militar con más de 2,000 efectivos desplegados en la frontera tamaulipeca durante 2024.
El refuerzo militar comenzó el 3 de enero con el despliegue de 100 elementos de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano en Reynosa.
Este movimiento se realizó un día después de que autoridades localizaran con vida a 31 migrantes secuestrados por un grupo armado en un autobús en la carretera Reynosa-Matamoros.
En respuesta a la escalada de violencia en Nuevo Laredo y Matamoros, el 19 de enero la SEDENA envió 500 efectivos adicionales, incluidos 120 elementos de la Guardia Nacional y 380 del Ejército Mexicano.
Estos llegaron a los aeropuertos internacionales de Nuevo Laredo y Matamoros con el objetivo de intensificar operativos y disuadir actividades delictivas.
El 19 de marzo, otros 300 efectivos llegaron a Tamaulipas debido a los secuestros de migrantes y asaltos en las carreteras de Reynosa, Río Bravo y San Fernando, así como a los enfrentamientos donde participaron hombres armados.
El 24 de abril, ante la alerta de viajes emitida por Estados Unidos, otros 300 militares fueron desplegados en Reynosa para abordar el secuestro de ciudadanos estadounidenses. El 30 de abril, la SEDENA envió 685 efectivos adicionales a Nuevo Laredo y la zona ribereña. En mayo, se sumaron 100 elementos de Fuerzas Especiales.
El 13 de julio, 300 efectivos más llegaron a Reynosa para realizar tareas de disuasión, patrullaje y establecer puestos de control.
La alerta de viajes de la embajada de Estados Unidos en Matamoros se elevó al nivel 4 debido a la continua violencia.
El último refuerzo militar se registró el 24 de julio, con el despliegue de 100 efectivos de Fuerzas Especiales en Nuevo Laredo, tras la inseguridad que provocó el cierre de 192 tiendas OXXO y cinco estaciones OXXO GAS.
A lo largo del año, los operativos del Ejército Mexicano y la Guardia Estatal de Tamaulipas han resultado en el decomiso de armas, municiones y 150 vehículos blindados, tipo ‘monstruo’, así como la incineración de más de 5 toneladas de narcóticos.
Por Julio Manuel Loya Guzmán.
