CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Desde que arrancó la actual década, el consumir carne en Tamaulipas es un lujo, puesto que los precios por kilo de este producto no han tenido una mejora que se refleje en el bolsillo del consumidor, pues se han incrementado cada año hasta llegar hoy día a los 200 pesos por kilo, incluso, hasta más dependiendo del corte.
Esto ha ocasionado que las ventas se hayan estancado y que sus comerciantes apenas y puedan generar algo de ganancias.
Así lo destacan los tablajeros del Mercado Argüelles de Ciudad Victoria, quienes exponen como es que diferentes situaciones sociales han desencadenado los gastos de las familias en general no permitan que sus ventas mejoren desde hace algunos años.
Desde la sequía que azotó a Tamaulipas por 8 años consecutivos, la pandemia y hasta llegar a la inflación, son los principales factores para que hoy día los costos de los productos cárnicos estén por los cielos, aseveró don Héctor Morales, de la carnicería “La Sultana”.
Así mismo expuso que las ventas de todos los tablajeros locales, han caído hasta en un 60 por ciento, y no se han podido recuperar ni en los meses de diciembre, fechas en que el dinero fluye un poco más entre la ciudadanía.
Agregado a dichas problemáticas, se tiene también la competencia de grandes cadenas de supermercados y otras carnicerías foráneas que han venido a ser una “comodidad” para la clientela, convirtiendo al Arguelles en un “pozo” a donde muy pocos acuden ya a comprar carne fresca y de calidad.
Y es que por la cercanía de todos los establecimientos instalados, la sociedad ya no quiere batallar buscando donde estacionarse o gastar más gasolina de sus domicilios al centro, sino que busca rapidez y eficiencia en su movilidad, aunque la calidad y frescura de lo que compre no se acerca en lo más mínimo a lo que los del Arguelles o carnicerías tradicionales ofrecen.
“Ya estamos rodeados aquí verdad, porque antes la gente venía, venía de todas las orillas venía del centro, aquí al Mercado y ahorita ya desgraciadamente digo pues estamos nosotros en un pozo, todas las orillas están las tiendas de autoservicio. Tienen toda la comodidad su estacionamiento”, expuso don Héctor Morales, quien es carnicero con más de 50 años de experiencia.
Así también, agregó que aunque ofrecen buenos precios y muy parecidos a los de toda su competencia, les siguen “sacando la vuelta”, teniendo además la ventaja y beneficio que sus productos no tienen conservadores, ni están congelados por meses, pues viene directamente del rastro cada semana por lo que dura muy pocos días en el anaquel.
“Esta es menos dañina porque no trae químico, son vaquitas de aquí mismo son de pasto”.
Por último, el tablajero local detalló que esto no solamente se vive en la capital, sino en todas las regiones del Estado, y aseguró también, que espera que para el año siguiente este tema podría tener mejor panorama, pues el hato ganadero se está recuperando gracias a las lluvias y se espera también que en el 2025 se recupere nuevamente el estatus zoo sanitario que traería mayor beneficio a los ganaderos y esto se vería reflejado en el comercio.
“Y ahorita digo se esta reponiendo el ganado ya podrá haber más vacas porque tuvieron mucha pérdida los ganaderos por lo que la mortandad que hubo por la sequía y todo eso”.
Por. Antonio H. Mandujano