ALTAMIRA, TAMAULIPAS.- A casi dos meses de haber sido agredida con un machete por un sujeto, Alma Aída Juárez Trujillo exige justicia y teme por su vida, debido a que el responsable sigue libre.
“No quiero que esto quede impune, de hecho tengo mucho miedo, tengo miedo que él regrese y vuelva agredirme, en las noches no duermo y me levanto, quiero que lo busquen y que se haga justicia para que pague lo que me hizo”.
Los hechos ocurrieron a las 23:30 horas del 19 de septiembre, a la altura de los tacos del Avión en la colonia Altamira Sector Dos y este lunes 11 de noviembre acudió por primera vez al ministerio público en Altamira para ampliar su declaración.
Aída, de 45 años de edad, se dedicaba a vender tamales en el lugar donde fue atacada, afuera de una carnicería.
“Él me dejó muy herida el pasado 19 de septiembre, no había podido venir porque estaba muy grave en el hospital, él me dejó muerta”.
Relató que el 19 de septiembre y después de haber vendido los tamales, ella esperaba su cena, cuando de repente el agresor empezó a insultarla sin motivo aparente, la tocó y ella le exigió respeto, lo que más molestó al sujeto.
“Cuando acordé ya estaba detrás y solo escuché que me iba a matar perra maldita, así me dijo, yo le volteo la cara y fue cuando me dejó caer los machetazos en la cabeza”.
El agresor, vivía a un costado de la carnicería donde ella vendía tamales, presuntamente es trailero.
“Ya me tenía muy herida, lo que hice fue resbalar debajo de la banca y caí sobre la banqueta, de hecho me caí, me levanté bañada en sangre y caminé hacia los tacos del avión y les pedí que me ayudaran”.
Los doctores le han indicado que en el brazo tiene dos heridas causadas por el machete y a pesar de las siete operaciones que le han realizado, todavía lo tiene delicado porque no tiene mucha sensibilidad.
Por. Óscar Figueroa
La Razón