‘El cáncer de las fuerzas básicas’
DANIEL VÁZQUEZ
No lo digo yo, lo dicen jóvenes tamaulipecos que han tenido que abandonar el sueño de convertirse en futbolistas profesionales en las categorías principales del fútbol mexicano o que se han visto obligados a buscar oportunidades en otros equipos.
Tras la publicación de mi columna de ayer, donde mencioné que Gandhi Vega ha sido uno de los primeros ‘corridos’ de Correcaminos y que Gustavo Ramírez podría ser el próximo, recibí varios mensajes, tanto en mis redes personales como en las de Oé!.
Todos los mensajes provenían de jóvenes que formaron parte de las fuerzas básicas del equipo en Tercera División y Liga Premier. En todos los casos, hay algo en común: abandonaron el barco, y señalan como principal responsable al actual director de fuerzas básicas, Gustavo Ramírez.
Aunque accedieron a hablar, todos lo hicieron de manera anónima, ya que, de alguna manera, aún conservan la esperanza de volver a intentarlo en el futuro y no quieren cerrarse las puertas.
Uno de ellos, a quien llamaremos Pablito, compartió su experiencia. “Gustavo tiene el poder de decidir este sí o este no. Lamentablemente, me tocó vivir el peso de ese poder. Yo siempre he sido seguidor de Correcaminos; me ilusioné cuando estuve en TDP y entrenaba con Premier, pero él terminó por romper mi ilusión”.
Pablito relató que su desempeño era bueno y los registros de la Liga MX lo confirman: acumulaba varios partidos como titular y contaba con el respaldo del entrenador Jaír García. Sin embargo, entre la ‘grilla’ de compañeros y problemas con el directivo por unos comentarios, su situación cambió.
Según Pablito, Gustavo no tuvo compasión y por ‘caerle mal’ decidió pedirle la renuncia, a pesar de que Pablito se defendió de todas las difamaciones, pues asegura él como muchos que si no le caes… ya valió.
También mencionó actitudes del directivo que considera inapropiadas. “Es muy llevado, hace comentarios y bromas que a veces pasan los límites. Y cuando estaba con Gandhi, eso empeoraba”.
A pesar de todo, Pablito no pierde la esperanza. “Sigo soñando con regresar a Correcaminos, aunque mientras esté esa persona, sé que será imposible. Si pudiera, ni quisiera lo intentaría”, concluyó, agregando: “Como dicen ustedes, la prensa, cuando alguien hace daño es como un cáncer. Gustavo es el cáncer de las fuerzas básicas”.
El testimonio de Flaco
Otro jugador, a quien llamaremos Flaco, también compartió su opinión, aunque de manera más breve. “Es muy doble cara. A ti te dice que mereces estar más arriba, que vas a llegar lejos, pero luego va o iba con Gandhi y dice todo lo contrario”.
Flaco confesó que esta situación lo desgastó. “Él y Gandhi hicieron muy buena mancuerna fuera de la cancha. Me dejó un mal sabor de boca, tanto que terminé por salir. Ya no quería jugar ni disfrutaba del fútbol”.
Intentamos contactar a jugadores actuales de Premier y TDP, pero la mayoría prefirió no hablar por temor a represalias o no meterse en problemas. Sin embargo, los comentarios negativos hacia el directivo no son nuevos, y los rumores de problemas aún más graves continúan.
Es importante aclarar que estos relatos son opiniones y experiencias de los involucrados, no juicios de este medio ni míos. Por ello, dejamos abierta la invitación a Gustavo Ramírez para ejercer su derecho de réplica.
Aquí cumplimos con dar voz a los jóvenes victorenses que buscan cumplir su sueño en Correcaminos. Ahora, la pelota está del otro lado, y esperemos los comentarios de este personaje.
Por lo pronto, las cosas en Correcaminos parecen esclarecerse y empiezan los movimientos. Héctor Eugui y Juan Carlos Roman, son los más avanzados para tomar el puesto de director deportivo, y sean quien sea, tendrá mucha tarea y limpiar a Correcaminos de pies a cabeza para que empiece a BRILLAR.
Por Daniel Vázquez