VICTORIA, Tam.- Ante la amenaza de una deportación masiva de migrantes desde Estados Unidos a la llegada del presidente Donald Trump, el Sistema DIF Tamaulipas se coordina con la Secretaría de Salud para la revisión de instalaciones de alberge y médicas que puedan requerirse.
La Directora del DIF Tamaulipas, Patricia Lara Ayala dijo que, aunque no se tiene la certeza del número de personas mexicanas o de otras nacionalidades que puedan ser deportadas por la entidad, ya se trabaja para esta eventualidad.
“Tanto el Gobernador Américo Villarreal como la Doctora María, han tenido reuniones de trabajo en los que se revisan los centros de atención de todo el estado y las capacidades, los centros de salud, los hospitales, para estar preparados”.
Lara Ayala comentó que están en pláticas con funcionarios de la Federación para acceder incluso a recursos que puedan ayudar a la atención de las personas que sean deportadas.
“La Doctora Claudia Sheinbaum está al pendiente de la frontera con este tema, hemos tenido reuniones de acuerdo con la Federación, el Gobernador ha tenido estas reuniones y nos ha girado las indicaciones que dan desde allá; y están a favor de darnos el apoyo que nosotros como estado de Tamaulipas les solicitemos”.
Por lo pronto y ante la llegada de los fríos, dijo que están atendiendo peticiones que se hacen desde los albergues y casas de migrantes, para la dotación de cobijas y otros implementos que ayuden a mitigar las consecuencias de las bajas temperaturas.
La Directora del DIF Tamaulipas, recordó que tanto el Gobierno del Estado como el propio DIF, cuentan en la frontera, con cinco centros de atención de migrantes, menores con familias y menores no acompañados.
“En el centro tenemos aquí en Victoria y en el sur tenemos tres, solo en ese tema, pero además contamos con muchos lugares como polyforums o gimnasios que pudieran habilitarse, pensando que esto (deportaciones) fuera algo muy grande”.
Agregó que además se cuentan con comedores, los centros del bienestar, entre otras instalaciones que pueden en un momento, utilizarse para la atención de personas deportadas.
“Hay una capacidad, pero podemos ampliar para responder a la necesidad que se presente”, explicando que en esta misma semana, el Procurador de la Defensa del Menor y la Familia, acompañó a funcionarios federales, en la revisión de centros de migrantes, “preparándonos para la situación que se nos viene”.
Perla Reséndez