Desde que comenzó la nueva etapa política y de la administración, Américo Villarreal Anaya dejó claro que cambiaría el estilo de dirigir el gobierno y de manejar los recursos públicos.
Gradualmente se nota la diferencia respecto al pasado, pues ahora se ha realizado un ambicioso programa de obra pública e implementado numerosos programas asistenciales, proyectos de salud y educación utilizando los recursos disponibles y sin recurrir al endeudamiento.
Precisamente, esta es la base sobre la cual se ha construido la fortaleza de la Cuatroté en Tamaulipas, pues Américo ha reiterado la indicación a sus colaboradores para que eviten el despilfarro y la ejecución de proyectos de obra que no tengan carácter prioritario.
El tema cobra relevancia porque recientemente han surgido versiones sobre un supuesto endeudamiento que tendría el estado para concretar el plan de construir 15 estaciones de seguridad en la carretera Reynosa-Nuevo Laredo.
Ya salió a decirlo el Vocero de Seguridad estatal, Jorge Cuéllar que ese proyevto no implicará que Tamaulipas adquiera deuda, pues para poder hacer esas estaciones de seguridad que darán mayor tranquilidad a los usuarios de esa vía carretera, el estado tendrá un acceso anticipado a recursos porque precisamente, cumple con los estrictos requerimientos reglamentarios de la Secretaría de Hacienda y de Banobras, algo que no todas las entidades del país pueden tener.
Además, el dinero provendrá del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas, un programa que fue creado con las características adecuadas para financiar este tipo de proyectos, en especial a los estados que tienen una mejor gestión administrativa y responsabilidad para manejar los recursos.
Al cumplir con este perfil, Tamaulipas calificó en la evaluación de criterios establecidos por Hacienda y Banobras, lo cual confirma que el gobernador Américo Villarreal Anaya ha logrado mantener en orden las finanzas públicas y colocar al estado como una entidad modelo en el ámbito nacional.
El funcionario fue enfático al afirmar que no será una deuda que adquirirá Tamaulipas, sino que es el beneficio por tener un manejo responsable de las finanzas y con ello, proyectar confianza sobre su administración.
La construcción de la nueva red de estaciones de seguridad en la carretera Reynosa-Nuevo Laredo ayudará a enfrentar el problema que afecta a miles de familias que habitan en esa zona, debido al abandono, inseguridad e incertidumbre que viven quienes transitan por esa vía.
El plan delineado por el gobierno estatal considera que las nuevas estaciones de seguridad sean puntos de vigilancia, monitoreo y apoyo a los automovilistas y a toda persona que transite en esa carretera.
De acuerdo con el proyecto, tendrán un equipamiento tecnológico de primer nivel como antenas transmisoras de radio, telefonía y sistemas de videovigilancia, lo cual garantizará una cobertura de seguridad integral en una de las zonas más transitadas y vulnerables de Tamaulipas.
Además, su beneficio se notará con claridad pues busca proteger a los ciudadanos, reactivar la conectividad y el comercio en la región, impactando positivamente en la calidad de vida de los habitantes de esa zona del estado.
Con esto, el gobierno de Américo confirma que trabaja en favor de la seguridad inmediata y en la construcción de un legado que marcará la diferencia en la vida de los tamaulipecos, sin endeudar a los tamaulipecos como sucedía antes.
ESCOTILLA
Primero, el encontronazo verbal entre los senadores Gerardo Fernández Noroña y Javier Corral, en donde el primero acusó al expanista de malagradecido y hasta insinuó que la Cuatroté intervino para evitar que la Fiscalía de Chihuahua lo encarcelara. De ser cierto, habría un tráfico de influencias y protección a un presunto delincuente que mancha los mantras morenistas.
El segundo caso fue la agresión del coordinador de senadores oficialistas, Adán Augusto López con el senador panista Enrique Vargas del Villar, a quien amenazó y caso golpeó.
Las cosas no marchan del todo bien, pues a pesar de tener una sólida mayoría, el bloque oficialista parece mostrar que su lado flaco es la intolerancia. En cuanto a Fernández Noroña y Corral, aplica bien el dicho aquel que habla de que, hay casos en que hasta a los de la misma casa se muerde. Vaya nivel que tienen.
POR TOMÁS BRIONES
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