La visita que hará este día a la frontera la presidenta Claudia Sheinbaum es una gira de trabajo con un mensaje político contundente: Tamaulipas tiene el respaldo total del Gobierno de la República y, particularmente, el gobernador Américo Villarreal Anaya, cuenta con la confianza absoluta de la mandataria nacional.
La relación entre Sheinbaum y Villarreal no es reciente ni superficial, pues se ha construido sobre los pilares de la lealtad institucional, el compromiso con la transformación del país y los resultados concretos en beneficio de las y los tamaulipecos.
Claudia llega como una aliada política que reconoce en Tamaulipas a un estado clave en el entramado nacional del segundo piso de la Cuarta Transformación, que en los últimos dos años se ha confirmado con Américo.
Y es que la administración que encabeza Américo Villarreal ha demostrado, en poco más de dos años, que el humanismo mexicano no es un discurso, sino una forma de gobernar: cercana a la gente, sensible ante las problemáticas sociales y eficaz en la gestión pública.
Así quedó demostrado en su más reciente Tercer Informe de Gobierno, donde se presentaron avances medibles en seguridad pública, generación de energía, desarrollo económico, combate a la desigualdad y gobernanza con perspectiva social.
En ese marco, la presencia de la presidenta en dos de los municipios más importantes de la frontera -Reynosa y Matamoros- es importante en el momento actual, pues llega a supervisar personalmente las acciones emprendidas en apoyo a las familias afectadas por las recientes inundaciones.
Es una muestra clara del enfoque territorial y humano que distingue a la nueva etapa del gobierno federal, pero también, llega a dar el banderazo del Programa de Vivienda para el Bienestar y a firmar un decreto de condonaciones fiscales en beneficio directo de las familias más necesitadas.
Ambos actos son parte de una política social profunda que privilegia a quienes más lo requieren, y que encuentra en Tamaulipas un terreno fértil para florecer gracias a la voluntad política del gobernador y su equipo, quienes han sabido coordinarse con la Federación y responder con eficiencia a los retos del estado.
En los hechos, el respaldo de Sheinbaum a Américo se ha traducido en la autorización de proyectos estratégicos que durante años fueron postergados por administraciones anteriores, y que hoy avanzan con paso firme.
Entre ellos destacan la segunda línea del acueducto en Ciudad Victoria, una obra fundamental para garantizar el abasto de agua en la capital tamaulipeca, así como el tramo del tren Saltillo-Nuevo Laredo, que potenciará el comercio exterior y posicionará a la frontera tamaulipeca como uno de los motores logísticos más relevantes del país.
La visión compartida entre la Presidencia y el Gobierno de Tamaulipas no solo acelera el desarrollo de obras y programas; también envía una señal de estabilidad, confianza y rumbo.
Es evidente que la confianza presidencial en Américo Villarreal no se improvisa: es el resultado de una gestión congruente, austera, sensible y profundamente transformadora.
Desde su llegada al gobierno estatal, Villarreal ha ejercido el poder con serenidad, con base científica y con una convicción democrática, ya que su formación médica se traduce en un estilo de liderazgo que prioriza el bienestar, la escucha activa y la toma de decisiones basada en evidencias.
Esa forma de gobernar ha generado empatía con el gobierno federal, pero también con amplios sectores sociales que hoy reconocen en el mandatario tamaulipeco a un servidor público confiable y comprometido.
Así, este viernes no se escribirá un capítulo más en la agenda política del país, sino una página relevante en la historia del entendimiento institucional entre el Gobierno federal y el de Tamaulipas.
ESCOTILLA
Ayer al mediodía, el Cabildo se Tampico anunció que la empresaria Amparo Berúmen será reconocida con la medalla al mérito ciudadano “Fray Andrés de Olmos”, que otorga la ciudad a sus habitantes distinguidos.
Doña Amparo es una persona ampliamente conocida en los círculos empresarial, cultural y social, con una fructífera trayectoria que justifica plenamente esta distinción. De esto, abundaré en el espacio de mañana.
En la misma sesión, también se aprobó por mayoría que el gobierno municipal entregue a una asociación religiosa un terreno en el fraccionamiento Colinas de San Gerardo, en permuta por uno ubicado en la colonia Villahermosa, que hace semanas fue objeto de una disputa con los vecinos.
Temas como el del valor del terreno que recibirá la asociación religiosa, su ubicación y la opinión de los vecinos, son asuntos que los regidores deberían analizar, antes de que se convierta en otro conflicto mayor.
POR TOMÁS BRIONES
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