CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Una joven madre de familia embarazada, fue diagnosticada con VIH Sida en el Seguro Social de Ciudad Victoria por error y con resultados de análisis que no correspondía a ella.
Además, una vez que al interior del hospital se hizo público entre las enfermeras, por iniciativa del doctor en turno, comenzó un viacrucis de discriminación y violencia verbales que casi la hacen perder el producto.
El relato de la mujer embarazada, Yudith Guadalupe U, sorprende e impacta y lo narra en sus propias redes sociales, donde cuenta paso a paso, lo que ella, su madre y su esposo vivieron el pasado 10 de febrero.
La joven madre que llegó al Seguro Social, para tener una revisión de rutina e incluir algunos documentos para su expediente, terminó internada, cuando su atención de todo el embarazo, había sido con un médico particular.
Al IMSS de Ciudad Victoria, llegó el pasado 10 de febrero; le harían “un ultrasonido para ver cómo iba mi embarazo, puesto que en el seguro no me habían realizado ninguno, cuando me lo solicitaron, me dijeron que había lugar hasta febrero”, fechas en que nacería su hijo.
En la narración de Yudith Guadalupe U, que hizo pública en sus redes sociales, la joven madre, avanza hasta que finalmente le dicen que debe internarse porque su bebe nacería y comenzó el calvario.
Desde las 6 am que llegó, fue atendida a las 9:40 de la mañana y a partir de ahí el viacrucis. Las horas transcurrieron hasta que en la noche, un médico de turno le comentó que, tendrían que cambiar su atención y no le harían cesárea porque los estudios revelaron que era portadora de VIH Sida y buscarían que su hijo no se contagiará.
Los momentos de discriminación de las enfermeras, la hicieron pasar las peores horas. Invadida de miedo y discriminada, hizo un recuento de todos los estudios que de forma particular se hizo y nunca había salido positiva a VIH.
Pero casi a gritos, una enfermera a otra, reclamaba porque no le avisaban que había una mujer embarazada infectada. Más discriminación. “Yo escuchaba hasta el cuarto”.
Era evidente su inquietud y no fue hasta que consiguió un teléfono celular, -porque su madre se había llevado todas las pertenencias-, para iniciar las primeras acciones de rescate.
La primera llamada fue a su madre, para preguntarle si le habían entregado algunos resultados de análisis o le comentaron algo, la respuesta fue: no.
Su esposo conoció toda la historia y se pudieron comunicar con su doctor particular, alguien que de entrada, aseguró que ese diagnóstico era imposible, pero recomendó su egreso del IMSS y al día siguiente hacer un nuevo análisis y posteriormente la vería en su consultorio particular.
“Al llegar mi esposo a la ventanilla, les dice que quiere el alta voluntaria y ellos le comentan que por qué motivo, su respuesta fue por racismo y en ese momento ellos dicen: “ha!, es la chica que está infectada” y él -su esposo- les dice:, “por eso mismo”.
Para ese momento, llegó el anestesiólogo y me pensaban pasar, que solo esperará que el Doctor del IMSS saliera de una cirugía, ya solo lo que querían, era sacarme y lo hicieron esperar una hora y media; el Doctor mandó a un enfermero para que mi esposo firmara, el ya no salió a dar la cara, me quitaron el catéter y empecé a tirar mucha sangre, no me taparon con nada y eso que pues decían que tenía esa enfermedad”.
Añade: “Salimos del hospital a las 3:00 am, nos dirigimos a casa, descansamos y a las 7 yo ya estaba en los laboratorios; pedí análisis de urgencias, a la 1:30 estaba ya en el consultorio del Doctor y claro que era negativo, me alivie en el particular… mi bebé está completamente sano, sin ningún tema de virus como en el seguro de la loma mencionaron”.
Remata: “Gracias a Dios teníamos para pagarlo y realmente lo cuento porque espero que a nadie le pase y los directores les pueda llegar, para que tomen nota de estas situaciones. No sé por qué descuentan un servicio médico si recibimos eso, fue un tema porque después, no me bajó la leche y pues si tenía incertidumbre de todo pero gracias a Dios, todo fue un mal resultado y a pesar que yo sabía que no tenía eso, con tantos comentarios y el mal trato, me hicieron dudar y sentirme mal”.
Por Arturo Rosas H.
EXPRESO-LA RAZON