Por años, se ha discutido si un gobierno da o no las garantías para la libertad de expresión.
Todo es debatible, desde el punto de vista y el ánimo con que se vean las cosas.
Pero una muestra real, cuando se trunca esa libertad a los medios de comunicación y en particular a sus reporteros, es cuando comienzan a matarlos o los hacen huir de sus ciudades ante las amenazas.
Al menos en los últimos dos sexenios, los actos contra la prensa alcanzaron niveles muy delicados.
Egidio Torre Cantú, el peor gobernador que ha tenido Tamaulipas, aplicó la censura a rajatabla, amenazó a periodistas y los atacó desde el anonimato.
A quienes lo criticaron o simplemente publicaban información sobre secuestros, homicidios, extorsiones y acompañaba con estadísticas, le ordenaba a Guillermo Martinez, su jefe de prensa, que desacreditará a los reporteros. Les iniciaba una guerra sucia para atacarlos y avergonzarlos ante sus familias y compañeros.
Incluso, llegó a ordenar a muchos editores que despidieran a reporteros y cerraran las puertas en otros medios de comunicación. Muchos editores valientes, se negaron a esta orden.
Lo grave llegó con los crímenes de periodistas. En el sexenio de Francosco García Cabeza, hubo al menos cuatro crímenes, porque en uno de ellos, la hija de un reportero murió.
El 18 de enero del 2018 fue asesinado Carlos Domínguez en Nuevo Laredo y se inventaron a culpables para hacer justicia. Muchos lograron su libertad.
Un 29 de mayo de ese mismo año, fue asesinado a golpes Héctor González Antonio en Ciudad Victoria.
También un 29 de junio del 2022, afuera de su casa en Victoria, fue asesinado Antonio de la Cruz y su hija menor.
En todos los casos, las investigaciones están confusas, sin aclarar realmente.
Lo anterior se recuerda a raíz del mensaje que dio el gobernador Américo Villarreal.
En el marco del Día de la Libertad de Expresión, celebrado el pasado sábado, Villarreal Anaya destacó la importancia de este derecho fundamental en la democracia de México.
En su mensaje conmemorativo, el mandatario tamaulipeco ratificó el compromiso de su gobierno con la libertad de expresión y recordó que, en el pasado reciente, la censura y la represión fueron prácticas comunes en el estado.
Señaló que, durante el sexenio pasado, la censura y la persecución fueron utilizadas para silenciar a la ciudadanía y a la prensa.
«La persecución, la amenaza y la censura, eran las prácticas usuales de quienes se resistían a tener una ciudadanía y una prensa libre y sin mordazas», afirmó.
En un contexto de desinformación y noticias falsas, el gobernador destacó la importancia de la veracidad en la comunicación.
Señaló que la comunicación debe ser respetuosa y circular para que sea verdadera, lo que permite ejercer el derecho constitucional de réplica.
Villarreal Anaya, enfatizó que la transformación humanista que vive Tamaulipas, se sustenta en la libertad de expresión y la crítica al poder sin cortapisas.
«Hoy, la transformación humanista que vive Tamaulipas, se sustenta en la libertad de expresión y la crítica al poder sin cortapisas, dejando la mordaza y la persecución como el rostro autoritario del pasado reciente», remató.
La reacción De Patty Chio
En los últimos 10 años, ningún alcalde había querido invertir en reparar colectores, mejorar las tuberías de drenaje y las líneas de distribución de agua potable.
Aquellos que llegaron como los salvadores, decidieron enriquecer a sus empresas y no hace mucho de eso, en municipios como El Mante.
En este municipio, en la colonia Arbustos, donde vivían entre aguas negras cada que llovía, la Presidenta Municipal Patty Chio, inició no solo la reparación temporal de esta adversidad, anunció la reconstrucción de colectores.
Patty Chio, decidió no darle la vuelta a un problema que los alcaldes anteriores ignoraron; está afrontando personalmente cada uno de los reclamos que hace la gente.
Ese día que acudió a los “Arbustos” llegó casi con el 90 por ciento del personal de la Comapa y toda la maquinaría que tienen para arreglar esta falla histórica.
Chio, ha salido a contrarrestar las necesidades pero a escuchar también los reclamos de la gente.
Más allá de que hace su trabajo, está cumpliendo con la recomendación que hizo el gobernador Américo Villarreal, estar cerca de la gente para atender sus reclamos y necesidades pero además, tener gente con talento en el municipio, para poder gestionar y bajar recursos que ayuden a cumplir con las obras que, en este caso, requiere El Mante.
Por Arturo Rosas H.
