CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Hartos de lo que consideran una cadena sistemática de abusos, representantes de jubilados y pensionados federales tomaron este lunes las oficinas del ISSSTE en Ciudad Victoria para exigir la destitución de dos funcionarios locales, a quienes acusan de corrupción, negligencia y hostigamiento.
El bloqueo fue encabezado por miembros de al menos cuatro organizaciones: Asociación Tamaulipas, Unión de Jubilados y Pensionados Federales A.C., Prodignificación del ISSSTE y Nuevo Santander. Todos ellos aseguran estar cansados de la “impunidad y el desprecio institucional” que, afirman, enfrentan desde hace años.
“Estamos aquí porque ya agotamos los caminos legales y de diálogo. Nos cansamos de esperar soluciones que no llegan”, dijo Arturo Gutiérrez, uno de los voceros del movimiento y representante estatal de la Asociación Tamaulipas.
En el centro de las denuncias están Tomás Sánchez Lara, subdelegado del ISSSTE en la capital tamaulipeca, y Eduardo López González, titular del área jurídica.
Los manifestantes los señalan por frenar gestiones de los beneficiarios, desacreditar el trabajo de sus representantes legales y generar un ambiente de persecución contra quienes alzan la voz.
Entre las quejas más graves figura la demora en el cumplimiento de sentencias a favor de los adultos mayores, algunas con más de tres años de atraso.
“Tenemos pruebas de que prefieren pagar sanciones antes que cumplir con resoluciones judiciales. Esto va más allá de la negligencia: es corrupción institucionalizada”, afirmó Manuel Valderas Torrubiates, dirigente de la organización Prodignificación del ISSSTE.
Los inconformes anunciaron que permanecerán en las instalaciones hasta obtener respuesta de las oficinas centrales en la Ciudad de México.
También adelantaron que interpondrán denuncias formales por difamación y buscarán establecer una mesa de diálogo con autoridades federales para detener lo que consideran “una serie de abusos contra quienes ya entregaron su vida al servicio público”.
En Tamaulipas, se estima que más de 20 mil personas integran el padrón de jubilados y pensionados federales. Sus dirigentes advirtieron que, de no haber una solución pronta, la protesta podría escalar a nivel estatal.
Por Antonio H. Mandujano
