23 junio, 2025

23 junio, 2025

Entre el miedo y el sueño americano

Mariana es una joven tamaulipeca que vive en la ciudad de Alton, Texas a unos 25 kilómetros del suelo mexicano y vive cada día lo que muchos de sus paisanos: la amenaza real de una redada y el temor colectivo

Caminar por la Avenida Main para llegar a trabajar nunca había sido tan riesgoso para un mexicano indocumentado como ahora.

Apenas a unos 25 kilómetros del suelo mexicano en el Condado de Hidalgo, se encuentra Alton, Texas y ahí, miles de mexicanos con temor a que el sueño americano, se les convierta en una amarga pesadilla.

Es un día cualquiera en medio de la amenaza migratoria pero no un día igual: Aquí miles de latinos sin papeles, sienten que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) les respira en la espalda.

Mariana dice que el riesgo está latente pero además, ha generado una histeria colectiva, un miedo irracional a que el sueño de vivir en un país que les ha dado mucho y por años, se termine de la noche a la mañana convirtiéndose en un incierto despertar.

Trabajadora con visa pero sin permiso para laborar, ha visto como ha escalado el trabajo que hacen juntos la Policía Local, junto a la Patrulla Fronteriza y el llamado ICE: «Somos de los tres Estados donde más se arresta a personas, las camionetas del ICE van a sitios públicos como supermercados, sitios de comida, antros y eso ha generado una histeria colectiva», dijo.

Afirmó que en su trabajo, se han preparado y les han dado una especie de capacitación, para saber como enfrentar la posible presencia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y junto a eso, han tomado medidas que afectan a los indocumentados, pues han decidido ya no contratar.
Afirma que el miedo a las deportaciones, ha provocado incluso reacciones inusuales en mexicanos y latinos que residían sin papeles en Estados Unidos: «Conozco personas que incluso renunciaron al trabajo y regresaron a México por decisión propia, aun sabiendo que al no tener no visa no será fácil regresar».

Asegura que la vida en Alton ha sufrido alteraciones, pues hay negocios que han bajado la cortina temporalmente hasta que pase el riesgo; pero no solo ellos se protegen, afirma que en las calles hay menos gente, los cuales prefieren quedarse en su casa y evitar correr riesgos.

«Vivir aquí es aprender a cargar con el miedo sabiendo que estás arriesgando muchas cosas, yo creo que ellos (los estadunidenses y el Gobierno) saben que sin los mexicanos, latinos, indocumentados, hay muchas cosas que no van a funcionar, ni el campo, ni las fábricas, creo que esta «guerra» va a pasar a ser del tema migratorio al económico, porque los inmigrantes somos los que movemos mucho de su economía «, afirma.

Señala también que a pesar la amenaza y el temor a despertar del sueño americano, los latinos en general, aun sin documentos, no dejarán de intentar seguir viviendo en esta realidad que para ellos es mejor en muchas cosas, que la que les ofrecía su país de origen.

«Podrán levantar más muros, poner mas cámaras, mandar mas agentes pero no van a poder detener las ganas de un padre de darle de comer a sus hijos, si alguien quiere un futuro mejor va a venir a buscarlo aquí «, dice.
Y es que afirma, en la realidad nadie se quiere regresar y por más que la pesadilla amenace, siguen resistiendo para seguir viviendo el sueño.

A más distancia, el mismo miedo

Pero lo que se vive hoy en Alton, Texas y en todo el valle, comienza a preocupar a quienes viven todavía muy lejos de esa sensación de miedo.

En Morristown, Tennessee a más de 2 mil kilómetros de la frontera, Iván afirma que la presencia del ICE no es tan notoria pero el miedo sí.

Las historias de indocumentados deportados se cuentan por miles, y es que no importa si está pasando en Los Ángeles, en Florida, Texas o cualquier otra ciudad o estado, mientras el deportado sea un familiar, conocido o pariente de alguien cercano, se seguirá sintiendo el temor de ser el siguiente.

«Aquí la presencia del ICE no es tan visible pero ha comenzado el rumor, de que en cada patrulla de la policía local puede haber un elemento del ICE y con eso basta para que tengamos miedo, para extrememos precauciones, nadie nos queremos equivocar porque sabemos que el mas mínimo error, nos puede llevar de regreso a México y no queremos», afirma.

Con apenas 3 años en Estados Unidos, afirma que vivir aquí realmente les cambia la vida, pues pueden lograr metas que en México serían realmente imposibles o difíciles de alcanzar.
El miedo es el mismo, la lucha por seguir en el sueño americano es igual pues de aquí, nadie se quiere regresar a su tierra y menos, deportado.

El mantense Martin Pereyra, con empresas en Estados Unidos, afirma que al iniciar las redadas existe miedo e incertidumbre entre la comunidad latina en general, que labora sin documentos en ese país.

Afirma que eso se nota en su empresa constructora en el estado de Florida, donde cientos de migrantes han decidido incluso quedarse en sus casas y no salir a trabajar por miedo a las deportaciones.

Estima que la comunidad mantense supera las cien mil personas y asegura que el pánico es generalizado, pues hay gente que tiene toda una vida en ese país, sin tener resuelta su situación migratoria y eso, los tiene día a día, en medio del riesgo a ser deportados.

Piden a paisanos calma

Froylan Yescas Cedillo, cónsul de México en McAllen, llamó a los mexicanos que participen en las manifestaciones contra las redadas en McAllen y el Valle de Texas a mantener la calma.

“Hacemos un respetuoso llamado a nuestra comunidad mexicana a mantener la calma, evitar cualquier tipo de confrontación o actos de violencia», señaló, «privilegiar siempre el diálogo y el respeto».

Yescas refirió al movimiento de protesta contra las redadas antiinmigrantes que organizaciones civiles vienen preparando bajo el nombre de «No King», para reclamarle al Presidente Donald Trump en el día de su cumpleaños y contrarrestar el Desfile Militar que anunció Trump.

«También reiteramos que el Consulado de México en McAllen ofrece atención continua en materia de protección consular, todos los días de la semana, los siete días de la semana estamos disponibles para los casos de Protección», afirmó.

El Cónsul ofreció los números telefónicos 956 8216783 de Protección Consular y 520 6237874 del Centro de Información y Asistencia a Mexicanos (CIAM) para cualquier emergencia migratoria de paisanos.

«Nuestro Departamento (de Protección Consular) está disponible para brindar atención y asistencia en casos de emergencia o detenciones migratorias», dijo.

«El bienestar, la seguridad y los derechos de nuestra comunidad son nuestra prioridad, no están solos», dijo el Cónsul.
A través de un comunicado, el Consulado reafirmó su compromiso permanente de proteger y asistir a la comunidad mexicana, así como de fomentar la convivencia respetuosa y el diálogo como vías para la resolución de diferencias.

Los Alcaldes de las principales ciudades fronterizas y del sur de Texas rechazaron esta semana las redadas contra migrantes que desató la Administración del Presidente Donald Trump.
Se trató de un inusual posicionamiento, realizado por Alcaldes republicanos, demócratas y sin filiación partidista, y en una región en donde Trump ganó en la pasada elección presidencial, a través de la Alianza de Ciudades del Sur de Texas.

POR STAFF

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