4 diciembre, 2025

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VIDEO: A los 141 años fallece la tortuga Galápago más vieja del zoológico de San Diego

Sus especialistas la llamaban cariñosamente "la Reina del Zoológico"; ufría de afecciones óseas relacionadas con su edad avanzada que habían avanzado recientemente

“Gramma”, la tortuga de las Galápagos más antigua y una de las residentes más queridas del Zoológico de San Diego, murió a los 141 años aproximadamente, tras un deterioro óseo asociado a su avanzada edad, informó la institución.

La hembra, nacida en estado silvestre, llegó al zoológico procedente del Zoológico del Bronx en 1928 o 1931 y, durante décadas, “deleitaba a los visitantes con su dulce y tímida personalidad”. Sus cuidadores la llamaban cariñosamente “la Reina del Zoológico”. El deceso fue confirmado por el parque el 20 de noviembre.

El zoológico indicó que la decisión de practicar la eutanasia se tomó cuando las condiciones óseas asociadas a la longevidad “progresaron recientemente” hasta hacer inviable su bienestar. Visitantes recordaron su primera impresión al conocerla y cómo, con los años, regresaron con sus hijos para verla de nuevo. “Es increíble que hayan logrado vivir tanto tiempo”, dijo Cristina Park, de 69 años, añadiendo: “Y aún así, siguen ahí”.

Las tortugas gigantes de Galápagos superan con frecuencia el siglo de vida en la naturaleza y pueden alcanzar edades muy superiores en cautiverio, según registros históricos. Un caso emblemático fue Harriet, que vivió hasta los 175 años en Australia Zoo antes de morir en 2006.

En paralelo a los homenajes a Gramma, conservacionistas subrayaron que varias subespecies de Chelonoidis siguen clasificadas como Vulnerables o En Peligro Crítico en la Lista Roja, y que la restauración de poblaciones continúa siendo prioritaria en las islas ecuatorianas. Galapagos Conservation Trust

Gramma —que pasó parte de su vida como embajadora de su especie— se convirtió en un símbolo de longevidad del parque y de la cooperación internacional en favor de los quelonios. Incluso hace una década, el zoológico exhibía actividades educativas con tortugas gigantes centenarias, entre ellas “Grandma”, para acercar al público la biología y el manejo de estos reptiles.

Programas de cría y reintroducción han permitido recuperar poblaciones en varias islas, aunque persisten amenazas como especies invasoras, pérdida de hábitat y eventos climáticos extremos. Organizaciones como la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y entidades científicas mantienen actualizados los listados de riesgo y los planes de manejo.

En redes sociales, el público compartió recuerdos y fotografías de visitas con varias generaciones. Para muchos, “la Reina del Zoológico” personificó la continuidad de una institución centenaria en la que, como repiten sus cuidadores, cada individuo importa para la educación y la conservación.

CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR

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