Primero fue Honduras, hace un par de semanas, y ayer Chile fue otra expresión de la tendencia política que empieza a imperar en Latinoamérica.
De acuerdo con los resultados preliminares, el candidato de la derecha ganó de manera contundente en Chile, dando fin a un régimen que terminó por agotar su viabilidad.
No es una certeza, pero si las condiciones siguen siendo similares en los demás países donde habrá elecciones en el siguiente lustro, no es lejano el escenario en el que la izquierda continúe desgastándose y vaya perdiendo el poder.
El agotamiento del modelo de gobierno de la izquierda en Latinoamérica es irreversible, lo mismo derivado de los excesos en el ejercicio del poder —corrupción, impunidad, inseguridad— que por los embates de la derecha.
Los conocedores de la política siempre aconsejan poner atención a este tipo de tendencias, pues si en la región de Centro y Sudamérica comienza a darse un viraje ideológico hacia la derecha, se da por hecho que éste se impondrá de manera gradual en la mayoría de los países.
Claro, el caso de México tiene matices y no necesariamente significa que vaya a suceder lo mismo aquí dentro de seis años, pues el surgimiento del nuevo régimen se sustenta en prácticas y principios que, durante décadas, le dieron solidez y larga permanencia al viejo PRI.
Además, está el tema de las reformas estructurales que dan pilares institucionales fuertes a la Cuatroté, como la nueva Corte, la mayoría en el Congreso, en los congresos locales y en las gubernaturas, así que no es tan sencillo como quisiera la derecha.
Sin embargo, no puede descartarse que en el contexto continental, mucho de eso dependa de lo que suceda en Estados Unidos y su política exterior que ha colocado a los grupos criminales de México en su lista de enemigos de cuidado.
Mientras tanto, todas son señales y no es solo lo que sucede en lo interno, pues el regreso paulatino de la derecha al poder en el continente es parte de una estrategia geopolítica que va más allá de la comprensión y del fanatismo político en cada país, incluido México.
TURISMO Y OBRA PÚBLICA, EL RETO DE 2026 EN LA ZONA
Durante años, hablar del desarrollo de Ciudad Madero fue un ejercicio recurrente de buenas intenciones.
Hubo planes que no terminaban de aterrizar y una ciudad que parecía avanzar siempre atrás del ritmo que tenía Tampico, dejando de lado su potencial.
Hoy se empieza a mover en una dirección cuyo elemento principal es la coordinación regional, estatal y federal.
Parte central de ello es el respaldo que ha dado el gobernador Américo Villarreal al municipio, el cual va más allá de los discursos.
Esto se nota en acciones que se implementan tanto para aprovechar recursos en programas de obra como en gestiones del gobierno estatal y en lo local.
Es en ese contexto donde la administración que encabeza Erasmo González Robledo observa al turismo como un factor clave de desarrollo y, por lo mismo, planea trabajar en ese sentido.
El reto para 2026 en Madero pasa por ver al turismo como el eje de una estrategia de consolidación económica a partir de la diversificación de actividades, y ahí es donde entra el plan del Ayuntamiento.
Para el siguiente año, el turismo deja de verse como un accesorio y se coloca como un eje económico que requiere algo más que promoción.
Playa Miramar es el principal activo de la ciudad, al ser el destino turístico más importante del estado, con potencial para mantener una afluencia de visitantes más allá de Semana Santa y del verano.
El plan general que busca impulsar el gobierno local, en coordinación con la administración estatal y con el apoyo de la Federación, incluye la creación de un reglamento logrado este año, pero también obras de infraestructura como la red sanitaria en colonias cercanas a Playa Miramar.
Para ello es importante el acercamiento con el sector empresarial, lo que se refleja en las relaciones con el Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas (CIEST), la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresas (AMMJE) Sur de Tamaulipas, así como con el Consejo Empresarial de Madero (CEM).
Las relaciones con el gobierno de Américo y con los empresarios son el punto de partida de la estrategia que Ciudad Madero busca aprovechar para lograr los resultados de sus proyectos y afianzarse económicamente el próximo año.
ESCOTILLA
El Cabildo porteño acaba de aprobar la creación de la Autoridad del Centro Histórico de Tampico, una figura que, en los hechos, va a sustituir al extinto Fideicomiso del Centro Histórico (Ficehtam).
Ojalá que pronto se conozcan los planes para darle nuevamente dinamismo a las tareas de rescate de edificios de gran valor histórico y arquitectónico en la ciudad.
Desde que en el gobierno de Egidio Torre Cantú se dejó de aportar dinero estatal al Ficehtam y se le dejó morir, no ha habido esfuerzos públicos para retomar esos esfuerzos.
Por. Tomás Briones
abarloventotam@gmail.com




