TAMPICO, TAM.- Don René Bracamontes Martínez nació el 15 de diciembre de 1936 aquí en Tampico, Tamaulipas. Hoy cumpliría años el creador de las famosas tortas de la barda. Él estaría cumpliendo hoy 89 años de vida, falleciendo a la edad de 78 años, el personaje que le dio vida a este platillo típico del puerto jaibo, que se ha hecho muy famoso en muchas partes del mundo.
Don René fue hijo del Señor José María Bracamontes Contreras y la señora Silvestre Martínez Obregón, y es aquí donde se da el origen de la torta de la barda.
“Mi abuelo llega en el año de 1928 de Morelia, Michoacán, a Tampico y aquí conoce a mi abuelita, estableciéndose aquí con un puesto de madera y llantas de fierro tipo carreta con unas tortas que les llamó tortas alijadores.”
Se trataba de una torta de sardina con tomate, cebolla y salsita verde, con una base de frijol y la típica sardina enlatada. Trabajadores del grupo Alijadores fueron los principales clientes de estas tortas.
“En ese entonces, sus principales clientes eran los del gremio unido de alijadores, un gremio que se dedicaba a descargar los contenedores de las embarcaciones que llegaban aquí a Tampico, y de los de Ferrocarriles Nacionales de México, ya que mi abuelo estaba establecido donde está ahorita, en el lugar que se le conoce como el monumento del Aguilita”, explicó.
Después se pasó frente al busto del héroe de Nacozari y posteriormente, donde actualmente están ubicados, pegados a la barda de ferrocarriles.
“Mi abuelo, al paso del tiempo, cae enfermo y en ese entonces mi padre ya trabajaba como carterista, que en esos años se les llamaba así a los ayudantes de contador o de escritorio en la primera botica que había en Tampico, que se llamaba Droguería del Pueblo”, dijo.
Don René, de esta manera, se unió al negocio familiar y prácticamente hizo un relanzamiento de la torta de sardina, ahora con nuevos ingredientes, para tratar de abarcar más clientela.
“Ya mi abuelo en ese entonces no vendía lo que se vendía cuando recién se inició, viéndose en la necesidad mi padre de transformar la torta de sardina, añadiendo y quitando ingredientes. El primer ingrediente que mi padre le puso a la torta fue la mortadela, y al ver que la mortadela le funcionaba, se la cambió por jamón y empezó mi padre a vender más. Así es como empieza a crear la torta de la barda, siendo los últimos ingredientes que le añade la carne deshebrada y la salsa de chicharrón”, detalló.
Gracias a Don René, este platillo está en el paladar de los tampiqueños a cualquier hora del día y muchos turistas llegan exclusivamente para probar y deleitarse con una torta de la barda.
“Como una prepa que en aquel entonces se llamaba Preparatoria Uruchurto y otras más, que decían: ‘¿A dónde vamos a almorzar?’ y se respondían: ‘Vamos a las tortas del Señor René, las que están pegadas a la barda del tren’. De ahí le nace el mote de la torta de la barda, siendo ya 97 años en el gusto de la gente, 4 generaciones al momento”, mencionó el Señor Arturo Bracamontes.
Y esta es parte de la historia que inició Don José María Bracamontes (a) Don Chema, y que Don René Bracamontes (el Negro) terminó de crear: la torta de la barda. Una familia que ha dejado este importante legado gastronómico a Tampico, a Tamaulipas y a México.
Han pasado 4 generaciones y 97 años, y Don René Bracamontes sigue dejando huella con su torta de la barda.
Por Mario Prieto




