Antes de que arrancara el proceso electoral en curso en el que están en juego 12 gubernaturas del país, el líder nacional tricolor Manlio Fabio Beltrones aseguró que su partido ganaría al menos 9, pero conforme avanzan las campañas hacia el día ‘de’ los más enterados, advierten que el tricolor podría perder el poder en media docena de palacios de gobierno.
Así es mis queridos boes, si la especie la confirman los ciudadanos en las casillas el 5 de junio, entonces el gran perdedor de la elección será el dirigente nacional del PRI quien de plano tendría que olvidarse de cualquier posibilidad de jugar por la presidencia de la República en el 2018.
Hay versiones que en lo personal me parecen desproporcionadas que indican que desde los búnkeres de Gobernación donde manda Miguel Ángel Osorio Chong y el de Hacienda, donde el jefe es Luis Videgaray, le estarían moviendo el tapete a Manlio para que su proyecto personal se descarrile, porque ambos están en la puja para el 2018, lo que se me hace absurdo y fuera de toda lógica.
Hacer perder a la mitad de los candidatos a las gubernaturas en juego es como preparar el terreno para que el PRI pierda la elección presidencial, sobre todo teniendo en cuenta que la imagen del presidente Enrique Peña Nieto ha caído a niveles históricos.
Insisto, apostar a que el PRI pierda, es apostar a la derrota de quien, entre sus filas así lo pretenda.
Lo que sí es cierto es que las cuentas no le están saliendo al ex gobernador de Sonora, porque el ave negra que anuncia la derrota sobrevuela importantes estados del país, si de porcentajes de votación nacional hablamos.
Veracruz es el más claro ejemplo de lo que puede pasar en el 2018, ahí los primos Yunes, se han lanzado como caníbales uno contra el otro y todos contra el gobernador más corrupto de la historia jarocha, Javier Duarte, dejando el paso al candidato de MORENA, Cuitláhuac García, a quien no pocas encuestas ya lo perfilan en la punta de las preferencias electorales.
En Chihuahua el panorama ha comenzado a sonreírle al candidato del PAN, Javier Corral, al que los sondeos le colocan sobre el independiente y el abanderado tricolor.
Puebla pinta para seguir panista, pero para el PRI peligran de acuerdo a los sondeos las gubernaturas de Quintana Roo, Tlaxcala y Durango.
Y si nos apuramos, hay que anotar que en Zacatecas el PRI corre el riesgo de perder el poder ante el crecimiento de Morena y que en Tamaulipas propios y extraños aseguran que se juega la gubernatura más disputada de la historia.
Si el panorama está como decimos, el gran perdedor de la elección del 5 de junio podría ser Manlio, si atrás de las derrotas están sus propios compañeros de carrera para el 2018, entonces todos van a perder, pero si el PRI pierde la media docena de gubernaturas sin mano negra, sin fuego amigo, entonces en el tricolor tendrán que ponerse a reflexionar muy seriamente de lo que sigue rumbo al 2018, no se valdría echarle la culpa al dirigente nacional, porque un diagnóstico simplista e irresponsable podría alejarlos de la solución que los vuelva a la carrera por la sucesión presidencial.
Por lo pronto ya se comienza a rumorar que este fin de semana andaría de nueva cuenta por tierras cuerudas el dirigente nacional.
En plan de broma, algunos tricolores decían que si esta vez sí vendría a ayudar o a alborotar la gallera como aquel sábado en que desató los demonios por el tema de las narcocandidaturas y puso a parir cuates ante la prensa nacional al dirigente estatal Rafael González Benavides y al diablillo de pastorela Fernando De las Fuentes, que mostró un colmillo ‘de leche’ ante los embates de Adela Micha.
No hay nada confirmado sobre la visita de Manlio, pero la que sí estuvo en Tamaulipas por enésima vez fue la ex candidata panista a la presidencia Josefina Vázquez Mota, quien primero en Tampico y luego en Victoria estuvo para apoyar la campaña de Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Vázquez Mota viene a Tamaulipas con suficiente gusto, si recordamos que acá en estas tierras ella obtuvo más votos para la presidencia que Enrique Peña Nieto, tal vez por eso los azules la pasean muy seguido en territorio cuerudo.
También ayer los candidatos de los partidos chiquillos confirmaron que no le entran a la propuesta de bloque anti PRI que ya conforman Cabeza de Vaca y el ex independiente Francisco Chavira y de paso aprovecharon para volver a repasar sus ataques contra el panista.
Era de esperarse, nadie en su sano juicio veía a Gustavo Cárdenas, Jorge Valdez o a Armando Vera sumándose al panista tras echarle montón en los dos debates.
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