‘Hagamos realidad la esperanza de muchos priistas, estamos listos’, rezaba al menos hasta anoche el último post en el muro de Facebook de Erick Silva Santos que daba pie a una fotografía multitudinaria en referencia a su precandidatura a la diputación federal; claro se había actualizado 21 horas antes, cuando aún no le explotaba la bomba que seguro lo dejó fuera de la contienda priista, incluso fuera del PRI y quien sabe si para hoy ya ande a salto de mata por quien sabe donde.
Así es mis queridos boes, el mundo parece habérsele venido encima al ex alcalde de Matamoros entre el 2008 y 2010, luego de que fiscales del gobierno de Estados Unidos presentaron una acusación en su contra por lavado de dinero, fraude bancario y fraude electrónico.
Cuentan los ‘gringos’ que desde el 2007, es decir cuando era candidato a la alcaldía, que por cierto ganó de calle en un triunfo entonces histórico para ese municipio, Silva Santos empleó varios esquemas para malversar recursos que tendrían que ser destinados a su campaña, además de aceptar sobornos y defraudar a las arcas municipales usando recursos públicos.
Según los fiscales, la acusación formal contra el ex alcalde priista fue presentada de manera formal desde julio de este año en la Corte de Distrito Sur en Brownsville, aunque la investigación sobre sus actividades ilegales ya tenían un año.
Por las transas, el ex alcalde habría obtenido varios millones de dólares que transfirió a cuentas bancarias de Estados Unidos bajo justificaciones falsas sobre la procedencia del dinero.
Erick tendría inversiones producto de ese dinero en las Bermudas y también con él se habría comparado una residencia en Brownsville.
Por lo pronto en el proceso que le siguen de aquel lado, ni modo que acá, ya le señalaron para confiscación 2.8 millones de dólares, varias cuentas bancarias y la casita.
Si para anoche no lo habían atrapado, hoy Erick Silva amanecerá como durmió, en calidad de prófugo de la justicia, luego de que se le girara una orden de aprehensión y que de ser capturado y sentenciado culpable le podría acarrear unos 30 años en una cárcel federal.
Todo lo anterior es sólo la versión de los gringos, habrá que ver si aparece el ex alcalde y dice algo o si pasarán meses o años para que sepamos su versión si no lo encuentran.
Lo que sí es un hecho es que Erick y sus bronconas legales sumen más en el pozo ya harto profundo al PRI de ese municipio que no ha visto la suya en los últimos 3 procesos electorales.
Y es que hay que reiterar que Silva Santos era hasta ayer por la tarde, antes de la noticia, el más viable de los tricolores para ser el candidato a la diputación federal por el distrito con cabecera en la tierra de Rigo.
De hecho, ya había comenzado desde hace unas semanas el activismo, el propio Homero de la Garza, Enlace Territorial, lo señalaba como el más viable para la candidatura.
Basta echarse una vuelta por la página de Facebook del ahora prófugo, para observar muchas fotografías de sus eventos en colonias y barrios de Matamoros donde era evidente que tenía el apoyo entre las bases del PRI.
Es decir, el golpazo para el tricolor de Matamoros es doble, porque la seria acusación de corrupción no sólo es para uno de sus ex alcaldes, sino para su gallo rumbo a la elección del año que entra.
La gran pregunta entonces es: si ya no es Erick, entonces, ¿quién podría dar la batalla por el PRI para la elección del 2015, si el resto de sus suspirantes no han prendido?.
Y cito otra vez a Homero de la Garza, quien decía maravillas de Erick y lamentaba que a personajes como Mónica González, secretaria de Desarrollo Económico no les haya alcanzado el tiempo para crecer.
Creo entonces que el PRI de esas tierras tiene que acelerar el paso, intentar darle vuelta a la página de Erick y comenzar a construir una candidatura que pueda darle la pelea a las huestes panistas de Lety Salazar que tienen en Luis Biasi y Verónica Salazar a dos prospectos de peso y popularidad, por los cargos que ahora detentan en Sedesol y DIF municipal, respectivamente.
Tal vez Homero tenga que opinar mejor de Mónica y subirla al juego o tendría el PRI municipal que empujar a un Alfonso Sánchez Garza o hasta convencer a Baltazar Hinojosa para que venga al rescate.
Por lo pronto, insisto, Erick Silva ha metido a su partido en un problemón de magnitudes colosales y le viene a dar un respiro a las zarandeadas huestes azules que en las últimas semanas no veían lo duro sino lo tupido.
Ahora que también habrá que contar con los deslindes que seguro se van a dar de la figura de Erick, que dicho sea de paso salió bien librado como alcalde.
Seguro no faltarán quienes desde anoche borraban fotografías de sus redes sociales con el ex alcalde prófugo, quienes quisieran que el interfecto cerrara si Facebook, porque aparecen en sus gráficas como Tino Sáenz o el primo Herminio Garza, secretario General de Gobierno con quien aparece abrazado durante su cumpleaños del año pasado.
Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong