LOS RESTOS DE
DON PORFIRIO
Perdonen la extravagancia
si piensan que es mi delirio,
pero ya están en Francia
los restos de don Porfirio.
Los restos de don Porfirio
en México los tenemos.
Ahí que los diga la Historia
al ver lo que padecemos.
Aunque no haya tiendas de raya
ni peones acasillados,
somo clase predilecta
nos gusta andar encuerados.
Las huelgas valen un cuerno
para el movimiento obrero,
ya que con este gobierno
perdemos hasta el trasero.
De acuerdo con el sufragio
hay uno pero efectivo,
solamente vale el voto
del Poder Ejecutivo.
Miguel Alemán quería
una reelección galana,
pero le sobró una pierna
pa´ser igual que Santa Anna.
El derecho de reunión
ya nadie puede ejercerlo,
la Defensa Nacional
no tiene porque tenerlo.
Aunque hay libertad de prensa
no me hagan ningún borlote
más vale el Sol de Valseca
que “El hijo del Ahuizote”.
Artículo 27
Parece bueno y sencillo,
pa’matarnos en caliente
como Rubén Jaramillo.
Artículos he nombrado
faltó el 123,
éste con Fidel Velázquez
es para andar al revés.
Perdonen la extravagancia
si piensan que es mi delirio,
ya ven como aquí tenemos
los restos de don Porfirio.
LA CASITA
(PARODIA)
¿Qué de dónde amigo vengo?,
de una casita que tengo
por allá en el Pedregal,
de una casita chiquita,
con jardines, alberquita
y calefacción central.
Tiene en el frente una barda
que vigilan unos guardias
que me manda el general.
Las bardas son alambradas,
muy bien electrificadas
por Comisión Federal.
Hiedras las tiene cubiertas
un guarura hay en la puerta
que la Procu me prestó,
Y en el portal una estatua
estofada de oro y plata
que el museo me donó.
Ver un garaje tú puedes
donde caben 3 Mercedes, 4
Mustangs y un Jaguar.
En el piso que está encima,
hay gimnasia, ring y esgrima
y un salón para bailar.
Bajo un ramo que la tupe,
la Virgen de Guadalupe
que el arzobispo me dio.
Ella cuida los dineros
que me dejan mis obreros,
por eso le rezo yo.
En un piso de allá arriba,
allá tengo mi oficina,
y un salón de proyección.
Y en el patio de la casa
juegos pa’toda la raza
y dos canchas de frontón.
Más adentro está la cama
que perteneció a Santa Anna,
nuestro mejor vendedor.
Tengo también un armario
que le transé a un anticuario
que en Palacio se robó.
Pues con todo y que es bonita,
que es muy linda mi casita
siento al verla no sé qué,
me he metido en la cabeza
que hay ahí mucha tristeza
pues falta algo que no sé.
Me falta ahí una cosa
muy grande y maravillosa
una columna ha de ser.
Cosa de tener paciencia,
Ángel de la independencia
en mi jardín te veré.
Si quieren yo los convido
a que visiten mi nido
que tengo en el Pedregal,
tomamos mi helicóptero
que nos llevará ligero
hasta el centro del jacal.
Me dirás muy asombrado
que de dónde habré sacado
coches, dinero y mansión.
A las claras te lo dice,
ese letrero que hice,
¡Viva la Revolución!
Si tu quieres al momento,
casa, vestido y sustento,
y una vida cual no hay dos,
ya no seas reaccionario,
hazte el revolucionario,
y que te bendiga Dios.
Parodia de la canción
“Mi casita”, Armando
Fuentes Aguirre
Óscar Chávez