Considerada una de la peores temporadas de gripe en varios años, la infección alcanzó nivel de epidemia la semana anterior, al rebasar el umbral de 6.9 por ciento de muertes por gripe y neumonía.
Sin embargo, el CDC apuntó que durante la última semana del año, la tasa de mortalidad por neumonía e influenza bajó a 6.8 por ciento.
El CDC había indicado que el virus experimentó esta temporada una mutación, por lo que la actual vacuna es menos efectiva este año.
Sin embargo subrayó que la vacunación ofrece un buen grado de protección contra la infección, sobre todo a poblaciones vulnerables como adultos mayores, mujeres embarazadas y niños.
Asimismo, llamó a evitar lugares públicos si se presentan síntomas, así como lavarse las manos y no acudir al servicio de emergencias de los hospitales para impedir contagios en poblaciones vulnerables.