CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El aumento que ha registrado el costo de la carne de casi un 50 por ciento, ha provocado la caída en el consumo de este alimento y que los tablajeros hayan disminuido la matanza de reses en el rastro local, debido a la poca demanda que existe en carnicerías locales.
Mensualmente en el rastro Tipo Inspección Federal (TIF), que se ubica en la Facultad de Medicina Veterinaria, el año pasado tenía un registro de sacrificio de 697 reses al mes, un promedio de 23 cabezas de ganado diariamente, cuya carne cubre la demanda de ciudad Victoria, así como de municipios cercanos.
Según Juan Francisco Mendiola, integrante de la Unión de Tablajeros e Introductores de Ganado, en estos momentos la matanza se redujo en casi un 50 por ciento, por lo que se realiza un promedio de sacrificio de 12 a 13 reses diariamente en lugar de las 23.
“Las 697 reses que se sacrificaban mensualmente en el rastro TIF de Victoria, producían 174 toneladas de carne, la cual se distribuía en las carnicerías de la ciudad”, destacó.
Dijo que más de 300 mil habitantes consumían en promedio 5 toneladas de carne de res, así como las vísceras; sin embargo, el alto precio de este producto ha bajado el consumo en la ciudad.
“La baja en la matanza no se debe a la falta de ganado, se debe a que bajaron las ventas por el aumento en el precio de diferentes cortes que se comercializan”, señaló.
Afirma que ganado hay en la región, sin embargo los tablajeros se quedan con la carne, por la poca demanda que existe por parte de la población, que está consumiendo productos más económicos como el pollo americano.
“Los incrementos que ha sufrido el precio de la carne ha provocado que la gente deje de consumirla, luego que el año pasado el filete para asar tenía un precio de 110 pesos el kilo, mientras que ahora se comercializa en diferentes comercios entre los 150 a los 160 pesos”.
La fajita aumentó de 130 pesos el kilo a 190 pesos, mientras que la costilla cargada pasó de 40 pesos el kilo a los 80 pesos, la milanesa de 120 pesos a 160 el kilo.
“Esta situación provocó que la gente cambie la carne roja por pollo o pescado, ya que en estos momentos el pollo americano que se vende en tiendas de autoservicio es sumamente barato, ya que se comercializa entre los 20 a los 25 pesos la pierna y muslo”, señala.
Agrega que otras opciones de la gente es comprar pescado, ya que el kilo se ubica entre los 60 a los 80 pesos el filete, dependiendo de la especie.
