CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Una larga fila de familiares y amigos acompañó hasta su última morada a la pequeña Lesly Mariel Colunga Martínez, de 12 años y estudiante de la Secundaria General Número Uno.
La menor perdió la vida tras ser atropellada por el conductor de un microbús que circulaba a exceso de velocidad y sobre los carriles centrales de la Calzada General Luis Caballero.
Ayer desde temprana hora, la capilla donde velaron a Mariel, fue visitada por maestros y estudiantes de otros grupos y de ambos turnos de la Secundaria donde estudiaba.
Ahí expresaron su impotencia y enojo por los hechos donde perdió la vida la menor.
Es una tragedia que no podían creer.
A las 16:00 horas un nutrido número de adolescentes esperaban el cortejo en las puertas del panteón del Cero Morelos para acompañarla hasta su última morada.
Con globos blancos, lágrimas en los ojos y un dejo de tristeza, en silencio participaban del duelo. Y la expresión de cariño se demostró en pancartas y leyendas: ‘Mariel, te amamos, te extrañamos…’
Otros traían en sus manos una rosa blanca que después dejarían en su sepultura.
Los familiares de la menor agradecían y sentían el cobijo de los compañeritos de Lesly.
“Sólo Dios sabe porqué se la llevó, la necesitaba”, dijo uno de sus familiares. Fue inhumada en la sepultura donde estaban sus abuelitos, un lugar donde la sombra de un frondoso ficus, todo lo cubría.
En medio de una gran tristeza, con cartas, flores, rezos, así despidieron a la menor quien descansa en paz.
