JAUMAVE, Tamaulipas.- A punto estuvo de registrarse la violencia entre elementos de la Secretaría de Seguridad y más de 80 comerciantes, luego que el presidente municipal, José Ramón Eguía Navarro, ordenó el desalojo con la fuerza pública de los vendedores de la plaza Escobedo, donde tienen más de 10 años ofreciendo sus productos.
Macrina de León Huerta, representante de los comerciantes, dijo que la semana pasada ya los habían retirado del lugar, por lo que tramitaron un amparo el cual fue otorgado por un Juez Federal para evitar ser removidos, el cual violó el Alcalde.
«La mañana de este lunes llegamos a la plaza donde vendemos productos de la región, ropa, frutas y verduras, así como alimentos, pero encontramos la plaza totalmente cercada con una cinta amarilla con la leyenda de prohibido el paso, así como las calles rodeadas por más de 40 agentes de la Policía Estatal Preventiva».
Explica que cuando intentaron instalarse en la plaza para iniciar con la venta de sus productos, el personal policiaco los desalojó, ya que según ellos tenían instrucciones del alcalde José Ramón Eguía de no permitir que se instalara ningún puesto en ese lugar.
Dijo que los ánimos se caldearon, sin embargo, la mayoría de los 80 vendedores que se instalan en la plaza Escobedo, son mujeres y ancianitas, prefirieron instalarse en la calle de enfrente de ese lugar.
«Ya la semana pasada nos habían hecho lo mismo, por lo que acudimos ante la Ley federal para solicitar un amparo, el cual se nos otorgó con el número 121/2015, el cual no fue respetado por el Presidente Municipal y los agentes de la policía, originando con ello una violación a la ley federal».
Dijo que en Jaumave se carece de fuentes de empleo para la gente, principalmente las personas de la tercera edad o las que viven en las comunidades rurales, quienes han encontrado en la venta de ropa, alimentos, productos del campo como las chochas, una forma decente y digna de ganarse la vida.
Niega el Alcalde ayuda a pobres
Socorro Contreras Silva, es una de las comerciantes afectadas, quien señala que la venta de comida es su único ingreso y con eso mantiene a dos nietos, quienes estudian el CBTIS.
«El Alcalde no tiene corazón, nos quiere dejar sin el sustento, además nos niega la ayuda a los más pobres».
Afirma que fue a pedirle una beca para sus nietos y nunca la atendió, ahora quiere quitarle la única forma que tiene para mantenerlos.
Doña Socorro afirma que a su edad nadie le da empleo y aparte en Jaumave se carece de fuentes laborales, y la venta de comida es la única actividad que tiene para mantenerse ella y sus nietos, que son huérfanos.
Esta es la segunda ocasión en que tiene que tirar los alimentos que prepara, porque los policías, por órdenes del Alcalde, no le permitieron vender y en estos momentos no tiene ni dinero para surtir, porque aparte tuvo que pagar las inscripciones del CBTIS de sus nietos.




