6 diciembre, 2025

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«Moche» presupuestal pone en riesgo al campo

Temen campesinos ser sacrificados, luego de que a nivel federal, la Sagarpa dejará de ejercer más de 6 mil millones de pesos; iría a la baja el financiamiento prometido

EL MANTE, Tamaulipas.- Campesinos de El Mante y Tamaulipas, temen que los recortes presupuestales anunciados por el Gobierno Federal para 2015, castiguen más al campo de la entidad, lo dejen con recursos limitados y con escaso financiamiento, que es lo que más requieren.

Organizaciones de campesinos como la CNC y la CNPR, argumentaron que el financiamiento anunciado desde el último trimestre del 2014 para el presente año, no llega como quisieran y en el campo, cada vez es más caro producir, menor la producción, bajos los precios de los cultivos y caros los créditos que se les ofrecen.
Eduardo Espronceda Galindo, líder estatal de la CNPR, dijo que todo esto, podría agravarse con los recortes presupuestales anunciados por el Gobierno Federal y que más que a otras áreas, impactarán al sector agropecuario.

«Hay algunos problemas con la economía y eso afectará mucho a la agricultura y la ganadería porque suben los costos de producción, hay pocos créditos, mucha gente no puede acceder a ellos y los que están disponibles están muy caros y el temor es que eso se agrave», dijo.

Agregó que estos problemas económicos del campo tienen su origen en una mala economía y la situación podría ser peor, debido a que todo en el país está asociado a la baja en el precio del petróleo, la cual se está sufriendo más en el 2015.

Añadió que incluso, algunos programas como el Proagro (antes Procampo) registra una disminución para la pequeña propiedad y se apoyará cuando mucho a 80 hectáreas, cuando antes eran 100.

«El gobierno está manejando bien la economía con estas disminuciones en el presupuesto para no cargarnos más impuestos, sin embargo, a pesar de eso pues estamos resultando afectados», dijo.

Falta el dinero fresco prometido

Por su parte, el exdirigente de la CNC en El Mante, Gabriel Anaya Fernández, dijo que la recesión económica, podría causar que el dinero fresco prometido para inyectarle al campo en 2015 a través de créditos, definitivamente se quede en promesa.
Explicó que hace cuatro meses fue anunciado que a través de distintos entes financieros, comenzarían a llegar créditos blandos, los cuales entrado ya el 2015, no se ven por ningún lado.

«No sabemos si ya no vayan a llegar por este tema de recesión económica o se están ‘atorando’ en algún lugar, el asunto es que no los tenemos disponibles y el Gobierno Federal, nos había dicho que para este ciclo otoño-invierno, ya íbamos a sembrar con estos recursos», añadió.

El también presidente del Consejo Distrital de Desarrollo Rural, dijo que es necesario que estos recursos ya anunciados, a los cuales se les prometió quitarles burocratismo e intereses, lleguen de inmediato.

«El problema es que mientras más sumidos estemos en el campo, más encarecida estará la vida en la ciudad, entonces esto nos pega a todos, los campesinos somos importantes y no estamos recibiendo este apoyo prometido», destacó.

Agregó que el mayor temor, es que esta situación se agrave y no solo se aleje la posibilidad de tener créditos más blandos, sino que se lleguen a escasear de forma tal, que se vayan volviendo también más caros.

«Con el tema de la recesión económica el riesgo es ese, que al rato, con los recortes se vayan a venir abajo más programas», indicó.

Por su parte, Eduardo Espronceda dijo que la baja disposición de ingresos del Gobierno Federal, está abonando a esta falta de dinero blando para los campesinos y eso sin duda, impide el flujo de recursos frescos.

El «tijeretazo» federal

Junto con la Conagua y la SCT, la Secretaría de Agricultura, es de las más afectadas por los recortes presupuestales anunciados por el Gobierno Federal, para contener la disminución drástica en el precio del petróleo.

La Secretaría de Hacienda, dio a conocer el pasado 1 de febrero, que la Sagarpa, tendrá para 2015 un 7.80 % menos presupuesto de lo estimado y con esto el recurso inicialmente calculado en 50 mil 563 millones para todo el país, se desplomó hasta los 44 mil 163 millones de pesos.

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