MÉXICO, D.F.- La respuesta a las demandas de infraestructura y servicios en las ciudades mexicanas ha sido la creciente motorización y el uso del automóvil particular, advierte ONU Hábitat en su Reporte Nacional de Movilidad Urbana en México 2014.
Esa situación, indica, se ve impulsada por la inversión en infraestructura vial para el transporte motorizado por parte de los gobiernos federal, estatales y del Distrito Federal, así como por el deficiente transporte público.
Según el informe, la red vial se ha diseñado y pensado principalmente en función de las necesidades del transporte privado, y 67 por ciento se concentra en zonas metropolitanas mayores a 500 mil pobladores.
Indica que en México, el índice de motorización llegó a 300 vehículos por cada mil habitantes en 2012, el doble con respecto a los 160 que había en el año 2000.
Asimismo, detalla que entre 2000 y 2012, el parque vehicular se incrementó de 15.6 millones de unidades a 35 millones.
Los automóviles privados representan cerca de 66 por ciento del parque total, observando una tasa media de crecimiento anual de 7.4 por ciento, que supera en cinco veces la tasa de crecimiento de la población.
“Es urgente avanzar en una estrategia de movilidad urbana sustentable, vinculada a las políticas de desarrollo urbano, vivienda y medio ambiente, en la que el eje sea el transporte público masivo, que reconozca la prioridad del peatón y los medios no motorizados de movilidad”, señaló en la presentación del informe Erik Vittrup, coordinador de ONU Hábitat para América Latina y el Caribe.