Hecha la sumatoria, Tamaulipas aporta al nuevo Congreso federal 15 diputados, de los cuales sólo cinco son mujeres, entonces la paridad de género se quedó como aspiración.
Pese a la insistencia de postular igual número de hombres y mujeres a las diputaciones federales, los partidos políticos que participaron en la contienda del domingo 7, le quedaron debiendo al sector femenino, al menos en Tamaulipas.
Habrá quien argumente que en el camino se acomodan las calabazas y cuando se haga el conteo total de curules a nivel federal la representación femenina se incrementará, puede ser, aunque a esta entidad le urge una mayor participación de las tamaulipecas en puestos de elección popular ganadoras y en cargos de toma de decisiones.
En fin, es el cuento de nunca acabar. De ahí la necesidad de que las mujeres reclamen su derecho a ser postuladas, especialmente el año entrante en que se abren más posibilidades que nunca en la historia de la política en México y en Tamaulipas.
Pues bien, 15 diputadas y diputados, buen número, pero que a la larga no tiene el peso para definir acciones y políticas que beneficien a la población tamaulipeca.
Lo hemos visto siempre, en la Cámara de Diputados la burbuja del poder controla todo. Los diputados y diputadas que no tienen las conexiones necesarias se quedan viendo cómo el mismo grupúsculo decide las leyes, reformas y todo lo inherente a las legislaciones.
Entre los que resultaron ganadores de mayoría y aquellos que consiguieron el premio plurinominal tienen experiencia, como Mercedes del Carmen Guillén Vicente, o Gustavo Cárdenas, pero a más de uno y una de los 15 les mueve el tapete la lucha por la gubernatura.
Lo cual significa que algunos de ellos se separarán de su curul para regresarse en unos meses a Tamaulipas a buscar la nominación por sus partidos.
Veremos seguido por estos rumbos a Paloma, a Baltazar, a Gustavo, a Alejandro, tal vez a Édgar Melhem, a Miguel, híjole, muchos tiradores y tiradoras para un solo puesto.
Ellas y ellos buscarán alianzas, en el caso de los priistas es poco probable una declinación desde ahora, todos esperan agazapados a ver cómo caminan las cosas para dar el siguiente paso, pero las desacreditaciones estarán a la orden del día.
El pataleo debajo de la mesa priista será de antología y alguien tendrá que ponerles un límite, como ya pasó, que ante el acelere de Enrique Cárdenas, tuvo que dar un golpe en la mesa el dirigente estatal del PRI y el delegado nacional, ya en el proceso me imagino que quien controlará a las y los acelerados será el propio Enrique Peña Nieto que no se arriesgará a mandar a alguien que no le asegure el triunfo en el 2016, como le pasó en Nuevo León.
Pero Enrique Cárdenas sabe su juego, alardea para ser tomado en cuenta, él es uno de los convencidos de que “vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error” y ha tenido una suerte tan grande que por décadas ha vivido del erario, así como él hay muchas y muchos en Tamaulipas, que saltan de un cargo a otro sin despeinarse.
Las y los legisladores priistas ganadores de la contienda pueden sentirse contentos, pero no satisfechos, la situación para los partidos políticos ante el electorado se complica día a día, el año próximo en Tamaulipas sus habitantes mostrarán la verdadera cara de la moneda.
Y para comprobarlo sólo basta revisar los números de las votaciones para cada uno de los partidos recolectados por la empresa Integralia en la “Evaluación de la elección 2015: Contexto, calidad y resultados”.
De acuerdo a esa información “en las elecciones del 7 de junio, Movimiento Ciudadano y Morena registraron incrementos en las votaciones para diputados federales en comparación a los comicios de 2009 y 2012. Por ejemplo, el porcentaje de votación de Movimiento Ciudadano pasó del 3.23% al 6.10%, y Morena –en sus primeras elecciones- “nació” con una votación del 8.39%. Por el contrario, los partidos que obtuvieron menos votos en estas elecciones fueron el PRI, el PAN y el PRD”, detalla una nota del portal Animal Político.
“Los tres perdedores de esta elección”, según Integralia, son el PRI, que pasó de 34.42% a 29.19% de votación; el PAN, de 26.96% a 21.02%; y el PRD, de 15.28% a 10.87%”. A estos resultados me refiero cuando digo que efectivamente el PRI ganó 8 de 8 en Tamaulipas, pero el número de votos no es alentador.
Quien crea que los resultados de la elección federal reposicionan al PRI, debería de pensárselo dos veces. En el 16 la población demostrará cuán satisfecha o insatisfecha está con este partido que ha gobernado Tamaulipas desde siempre.
Correo electrónico: derrotero@hotmail.com
Twitter: @derrotero_mx