MÉXICO, D.F.- El Festival del Solsticio de verano de Yulin, una pequeña ciudad en el sur de China, es el mayor del mundo dedicado a comer carne de perro.
Para intentar detenerlo, organizaciones proderechos de los animales en el extranjero se han movilizado a través de las redes sociales.
En Facebook, la página “Stop Yulin Dog and Cat Meat Festival 2015” suma más de 92 mil “me gusta”, y contiene mensajes en varios idiomas expresando la molestia e incluso el terror que genera el Festival.
Mientras que en Twitter, la etiqueta #stopYulin2015 recibe nuevas entradas cada pocos segundos; en un sólo día generó 75 mil 400 tuits.
Incluso hay una petición en Change.org dirigida al Presidente chino, Xi Jinping, y promovida desde Canadá que acumula ya más de 1.4 millones de firmas.
Existe otra solicitud similar que fue lanzada por el grupo estadounidense DuoDuo y dirigida al Gobernador de la ciudad de Yulin, Chen Wu, que tiene cerca de medio millón de firmas.
La organización Humane International, que el año pasado organizó una investigación sobre el sacrificio de los animales para el festival, también creó en su página web una recogida de peticiones.
De acuerdo con el Índice de Baidu, las búsquedas de “carne de perro” en los siete días pasados cayeron 38 por ciento interanual, mientras que “festival de carne de perro” tuvo 57 por ciento más de búsquedas.
Sin embargo, reveló que “¿cómo cocinarla?” y “¿cuándo es el festival?” fueron las preguntas más planteadas relacionadas con la carne de perro.
En sí, esto es poco para evitar la muerte de los perros.
Otros militantes de la causa animal protestaron de la forma habitual, con pancartas y personificando cómo es que los animales sufren.
“Luchen contra el comercio ilegal de carne de perro”, “castigar el transporte ilegal de perros”, proclamaban las pancartas antes de ser rasgadas por los contramanifestantes.
Todas la protesta tienen como objetivo pedir que se respeten las normas sanitarias y administrativas existentes, a pesar de que no hay ninguna ley en China que prohíba el consumo de carne de perro.
“La mayoría de estos animales son animales de compañía que han sido robados, y la mayoría de los camiones que traen hasta aquí la carne de perro lo hacen violando las leyes, muy explícitas, de China sobre los animales destinados al consumo humano”, declaró Adam Parascandola, encargado de las cuestiones relativas a la crueldad hacia los animales en la Humane Society, una asociación con sede en Washington.
“¿Durante cuánto tiempo va a dejar China a las autoridades de Yulin violar la ley de esta manera?”, preguntó en un comunicado.
Cada año se matan hasta 10 millones de perros por su carne en China, de los cuales 10 mil son para el festival de Yulin, según la Humane Society.
Un estudio publicado recientemente por la asociación Animals Asia, con sede en Hong Kong, asegura que la mayoría de estos canes, en efecto, fueron robados o son perros callejeros.
Los promotores del festival resaltan la tradición cultural ancestral que empuja a muchos chinos, en especial en el sur y el noreste, a consumir carne de perro.
Los que piden su abolición se apoyan, por su parte, en el apego creciente de la población china a los animales de compañía.
Así, alrededor de 30 millones de hogares chinos tendrían un perro como mascota.
Según los medios del país, el sábado, una amante de los animales, Yang Xiaoyun, gastó cerca de mil 135 dólares en comprar 100 perros y salvarles la vida.
Pero a la vez, las protestas extranjeras han generado también molestia entre un sector de los cibernautas chinos, ofendidos porque se critique una costumbre que consideran que existe desde hace siglos.
No termina de estar claro si las campañas en internet y las manifestaciones tendrá algún efecto.
Hay que tomar en cuenta que Facebook, Twitter y YouTube están bloqueados en China.