FRANCIA.- Yassin Salhi, detenido por los hechos ocurridos en Francia el viernes pasado en la planta de gas IndusTrial de Saint-Quentin-Fallavier, en las inmediaciones de Lyon, aseguró que el ataque perpetrado no tuvo motivos islámicos.
Así lo informaron medios franceses sin declaración oficial por parte de la policía. La fuentes son individuos cercanos a la investigación que pidieron no ser identificados.
De acuerdo con la emisora de radio Frenace Info, Salhi habría confesado ser el autor del crimen, en el que una persona resultara decapitada, pero negó haber actuado por motivos religiosos.
Salhi ifirmó que planeó y ejecutó el ataque tras una discusión que mantuvo unos día antes con su jefe.
No obstante, tras realizar la decapitación, colgó la cabeza en una verja de la empresa y la rodeó con banderolas ilustrada con inscripciones musulmanas.
Más tarde se tomó una fotografía con la cabeza y la envió a un ciudadano galo que se encuentra en Siria y que la policía francesa ha identificado como miembro de una célula de reclutamiento para el Estado Islámico.




