PARIS, Francia.- Ante la importancia que representa para su gobierno la visita de cinco días a Francia, el Presidente Enrique Peña Nieto decidió mantenerla, pese a la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Siete horas después de arribar al aeropuerto parisino, el Mandatario apareció en la residencia del Embajador de México, Agustín García-López, cabizbajo y con los ojos rojos, para ofrecer un mensaje de cinco minutos, sin preguntas.
“Estamos al tanto de un hecho muy lamentable, que ha indignado y que indigna a la sociedad mexicana. Me tiene profundamente consternado ante lo ocurrido, precisamente, en la fuga de uno de los delincuentes que hasta antes había sido de los más buscados en México y en el mundo.
“Esto representa, sin duda, una afrenta para el Estado mexicano, pero también confío en que las instituciones del Estado, particularmente las encargadas de seguridad pública, estén a la altura, con la fortaleza y la determinación, para reaprehender a este delincuente”, apuntó.
El Presidente llegó acompañado de su vocero, Eduardo Sánchez; el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, siete escoltas y funcionarios de la Embajada.
Informó que estuvo en comunicación con los titulares de seguridad y procuración de justicia, y le ordenó al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, coordinar las acciones necesarias para la reaprehensión de capo.
Además de pedir al comisionado nacional de Seguridad Pública, Monte Alejandro Rubido, reforzar las medidas de seguridad en los penales de máxima seguridad, y a la Procuradora Arely Gómez una investigación a fondo para determinar qué funcionarios fueron cómplices en la fuga.
También prometió que se mantendrá informada a la sociedad sobre las acciones gubernamentales para recapturar a Guzmán.
En su mensaje, Peña Nieto defendió la visita a París con el argumento de que “es histórica”, pues se firmarán alrededor de 60 acuerdos en energía, educación, salud, turismo, agricultura, medio ambiente, comercio, inversión y ciencia y cultura, entre otros rubros.
La más reciente visita de un Mandatario mexicano a Francia fue la de Ernesto Zedillo en 1997, mientras que el Presidente galo Francois Hollande estuvo en México en abril de 2011.
“Estoy siguiendo puntualmente los informes que me están rindiendo, sobre las acciones que estén emprendiendo y llevando a cabo.
“En tanto, mantendremos aquí esta visita histórica que México hace a Francia, que nos permita concretar estos acuerdos para llevar inversiones a México, para generar más empleos e intensificar la relación”, indicó.
Tras el mensaje, Peña Nieto salió a toda prisa rumbo a su hotel, sin detenerse, como en otras ocasione, a saludar a los reporteros.