EL MANTE, Tamaulipas.- La mayoría de los migrantes que regresan deportados de Estados Unidos, viven en la absoluta pobreza al regresar al país y en especial al municipio de El Mante, sin tener oportunidades laborales para desarrollarse y poder sostener a sus familias, aseguró el organismo de mujeres campesinas.
Narcisa Cepeda, dirigente del organismo, señaló que con regularidad arriban en El Mante decenas de personas que fueron deportadas de Estados Unidos y que al regresar a su tierra lo hacen igual que cuando se fueron, sin dinero y en medio de la recurrente falta de oportunidades.
Afirmó que estos casos se cuentan por decenas en las zonas temporalera y cañera del municipio, por lo que urgen estrategias para que estas personas que no pueden regresar a laborar al vecino país del norte, encuentren en su tierra oportunidades laborales a través de proyectos productivos o autoempleo, por lo menos.
«Es un problema social fuerte el tema de los migrantes que regresan al municipio y se encuentran totalmente desamparados, no tienen trabajo, no cuentan con seguridad social y no encuentran los medios para salir adelante», afirma.
Explicó que por parte de su organismo, realizó una propuesta ante la Liga de Comunidades Agrarias, con la finalidad de que se le pueda brindar algún tipo de apoyo a esos migrantes que regresan y que se encuentran en la pobreza y sin los medios para poder salir adelante en el corto y mediano plazo.
«La propuesta es simple, lo que hace falta es que se ayude a esa gente que regresa, porque no tienen ningún medio para subsistir, saben trabajar pero no encuentran un trabajo mediante el cual puedan sostener a su familia, aquí lo que estamos solicitando es que se les brinden apoyos a través de financiamiento para proyectos productivos, los cuales no están aterrizando», agregó.
Aseguró que no existe ningún gobierno que tenga una idea precisa sobre el número de migrantes que regresan a El Mante y por lo mismo es difícil establecer con claridad cuál es su situación, sin embargo, dijo que en el caso de la zona temporalera, se podrían emprender acciones para conocer la situación de quienes vuelven y no cuentan con recursos para salir de la pobreza.
Mujeres solas: la otra cara de la migración
Agregó que aparte este proyecto han presentado otros para que el gobierno pueda apoyar también a las mujeres que se hacen cargo de familias completas en las comunidades rurales.
Añadió que aunque no está claro el número de mujeres que se hacen cargo de las tierras y sus familias al quedarse sin marido porque estos se van a trabajar a Estados Unidos, bien se podría lograr un estudio para identificarlas y apoyarlas.
«No hablamos de un número específico, pero en cada ejido, en cada poblado se sabe bien quiénes son las mujeres que se hacen cargo de las tierras porque sus maridos se fueron y en muchas ocasiones no regresaron», dijo.
La lideresa explicó que lo que se debe de hacer es darles a estas mujeres otros medios para sostener a sus familias y que no solamente vivan de la labranza de la tierra, dado que en ocasiones la actividad agrícola se complica.
«Hemos estado pidiendo con insistencia que se aterricen los recursos a través de la dependencia que sea, en este caso de la Sagarpa, pero que lleguen, porque las mujeres no se echan para atrás, las mujeres sacan la cara por sus familias, pero requieren apoyos para poder enfrentar su situación».
Dijo que la propuesta que engloba todo el tema de migración tanto de quienes regresan empobrecidos, como de quienes se van y dejan las mujeres solas al frente de las tierras y la familia, fue presentada ante la Liga de Comunidades Agrarias para que a su vez, pueda ser tema en algún congreso nacional campesino y que de ahí, el gobierno desprenda de una vez por todas, acciones en beneficio de quienes son afectados por la migración.
