CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Fue una tarde donde llegaron seis de ocho.
Cautos unos, abiertos otros; pero también disciplinados, desbordando oficio y señales futuristas.
Paloma Guillén Vicente, dama al fin, llegó primero. Dejó en «veremos, en su momento», participar en la sucesión de Gobierno en el 2016.
Pero a bote pronto, no pasó por alto el comentario que el siete de agosto hizo Egidio Torre, garantizar en su momento, “el piso parejo para todos” a los aspirantes.
“Yo siempre he tenido la confianza con el Gobernador, el Gobernador es mi amigo, lo conozco como persona y como político, es una persona de primera, no tengo duda, de nada de lo que diga”.
Para entonces Ramiro Ramos se enfiló a su lugar en la Asamblea Estatal.
Los medios le cayeron y respondió: “Yo estoy seguro que Beltrones va a dirigir el proceso de manera impecable, así que todos tenemos oportunidad de participar en la trinchera que nos mande el partido”.
¿Qué se debe cuidar de aquí a que haya una decisión?
“Al partido”.
Afuera y aunque no evitó el tema, Édgar Melhem dio prioridad a otros asuntos, anteponiendo también al partido: “Esperar los tiempos en unidad”, dijo.
Pero cuando llegó a la Asamblea de Consejo Político, en el Polyforum, lo hizo rodeado de sus seguidores, como mandando una señal de porqué ganó la Diputación Federal.
Aquí estaban funcionarios y ex funcionarios que lo acompañaron en Sedesol federal cuando fue delegado, por aquello que le faltara gente que lo recibiera.
Por ningún acceso entró Enrique Cárdenas del Avellano. Hubo quién dijo que llegaría enfundado en cuera tamaulipeca, pero no llegó.
Después se confirmó que fue al informe de la mesa directiva del Senado de la República y al formar parte de la Comisión Permanente estaba obligado a asistir.
Pero cuidado, es la última semana que trabaja desde la Cámara de la Unión y regresa a Tamaulipas.
Y Marco Antonio Bernal, no reveló la agenda.
Cuando Baltazar Hinojosa bajó de su camioneta, un grupo de mujeres lo apapachó, lo besaron y lo abrazaron.
Se encaminó para encontrarse a los reporteros, pero antes, una apasionada priista lo tomó del brazo y le advirtió: “Ya estamos hasta la madre de imposiciones”.
El Secretario de Organización del CEN del PRI preguntó también sonriendo: ¿pues qué pasó? ¡Esas las mandaron ustedes!.
Por su oficio, Baltazar salió al paso. Y llegó la pregunta: ¿Está listo para Tamaulipas? “Estamos listos para ser diputados federales a partir del primero de septiembre”.
¿Se siente con ventaja?
“¡No’mbre!, yo no me he movido, yo no he hecho absolutamente nada, más que mi trabajo”.
“Aquí no hay ventaja para nadie, el partido, finalmente, es sabio”.
Cerca de aquí, llegaba Alejandro Etienne y todo fue rechazo en el tema de sus aspiraciones.
¿Ve que hay un favorito?
“No, ahorita son los tiempos de seguir trabajando y desde luego comienzan a abrir ya una serie de especulaciones, lo que es natural”.
La sentencia, como jurista que es la emitió antes de ingresar a la Asamblea: “Después del tres de septiembre, Dios dirá, ya veremos”.
El último que llegó fue Alejandro Guevara y el más brioso: “Yo siempre estoy listo para cualquier oportunidad que me tenga a bien dar mi partido”.
Remacha: “Soy un político de una generación emergente”.
Y también mandó un mensaje adelantado: “Yo siempre voy a estar dentro de mi partido”.
Después todos entraron a escuchar el mensaje del Gobernador: “Los vamos a elegir a tiempo, ni antes ni después, a tiempo”.




