CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- En un hecho inédito, cientos de trabajadores de las maquiladoras Delphi y el sindicato se arrojaron al rescate de dos familias desamparadas, construyéndoles en ambos casos, sus casas, que por distintas circunstancias quedaron destruidas, y con ello lanzaron un mensaje a la ciudadanía, el de ayudarnos los unos a los otros.
Ayer al mediodía, empresas de materiales descargaban decenas de blocs, cemento y varillas para reconstruir una casa a la señora, Ana María Moreno Cárdenas, a quien la vida le jugó una mala pasada; sus dos hijas fallecieron por males del corazón, y ella, enferma de diabetes, quedó con la enorme carga de las hijas de ambas.
En esta situación, Ana María tendría que darles de comer, pero sin posibilidades para trabajar, las cosas eran graves, muy complicadas; una historia negra, casi trágica.
Sin embargo, el cobijo llegó desde la Secretaría General de Maquiladoras de Victoria: la dirigente, Dolores Zúñiga Vázquez, intrigada por los comentarios de decenas de trabajadores en este caso, convocó a una reunión, pidiendo ayuda, siendo así como empezaron los primeros apoyos; un poco de efectivo, despensas, y sobre todo, asegurar los estudios de los menores; que no les faltase comida ni ropa.
Ante esta situación, Dolores notificó la situación a dos de los exponentes sindicales más solidarios, humanista en el Estado; Alberto Lara Bazaldúa, subsecretario general Adjunto de Planta Maquiladoras, y el secretario general, Miguel Tirso, quienes decidieron venir a Victoria a intervenir en estos casos.
Alberto Lara explicó que estas acciones no son de tinte político, sino totalmente solidarios, porque ven que todo el mundo se está cayendo a pedazos y nadie se apoya; guerra por aquí, pleitos por acá, y en el caso de Tamaulipas, que se desbordó por tanta violencia e inhumanidad, siguen la cosas iguales.
“Nosotros lo que buscamos es contagiar a la población, que vean y comprendan que tenemos que apoyarnos los unos a los otros, y no esperar en figuras políticas traicioneras, que buscan solo su beneficio.
A nosotros nos duele lo que nos ocurre, que ya no hay solidaridad, y pues qué mejor que ayudar de esta manera, con pocos pestiños, pero efectivos, y poner nuestro granito de arena en este mundo deshumanizado” dijo.
Explicó que convocó a reunión general y de ahí, nació la iniciativa de ayudar a esta señora con apoyos que consiguieron ellos mismos, pidiendo cooperación de los trabajadores de Delphi, quienes aportaron sacrificando un poco de dinero en pro de la ayuda social.
“Aquí, como ves, estamos solidarizándonos con ellos; su dolor es nuestro dolor, y pues tenemos a obreros de Delphi, haciéndola de albañiles, a obreras, cocinando para los otros; y así hemos sacado la chamba…” añadió.
No solo eso, a la señora Ofelia Hernández Cisneros, de 66 años, que su caso tuvo un impacto social muy intenso en la sociedad capitalina por perder toda su casa en un incendio; ya se la reconstruyeron en material de concreto, y aseguraron, se la entregarían hasta pintada.
Ella es madre de un obrero de la Delphi que trabaja el turno nocturno, y que pudo haber quedado atrapado en el incendio, y morir.
Una escena conmovedora, fue el caso de “Firulais”; el perro del vecino.
En el incendio, fue alcanzado por las llamas, pues estaba atado a un árbol y no pudo escapar; el 30 por ciento del lado izquierdo de su cuerpo quedó casi carbonizado.
Ayer, en un recorrido de inspección de los cuartos, los sindicalistas percibieron un olor fétido, a carne en estado de putrefacción.
Era “Firulais” que luchaba aún por su vida.
Con algunos pedazos putrefactos colgando de su cuerpo, fue trasladado a un hospital veterinario para su atención porque la escena, lastimaba por si sola.
Alberto dijo que estas situaciones duelen:
Todos los seres humanos pasamos por lo menos, una vez en la vida algo así, y la mayoría sortearon esos problemas solos, sin ayuda, y quedaron tan lastimados que les es difícil regresar a la solidaridad.
“Este es nuestro llamado; que la sociedad comprenda que realmente nos necesitamos los unos a los otros; que solo así podremos sortear obstáculos, crisis e incluso los problemas sociales más graves, incluso, hasta lo imposible”.
