MÉXICO, D.F.- El Restaurante Koi solicitó que el video en el que el mexicano Ricardo Aca critica a Donald Trump sea retirado.
La empresa publicó un comunicado en el que calificó de engañoso el video y aclaró que Aca sí es empleado de su empresa, pero que el restaurante sólo se ubica dentro un hotel de Donald Trump en Nueva York y no está afiliado de ninguna otra forma al millonario.
Asimismo, el texto señala que el mexicano tiene un permiso de trabajo válido, y por lo tanto, está legalmente autorizado para trabajar en Estados Unidos.
“En Koi SoHo, nos enorgullecemos en la contratación de la fuerza de trabajo y las personas competentes. Cuando el Señor Aca fue contratado inicialmente por Koi SoHo, este fue el criterio que hemos utilizado para contratarlo. Tenemos una fuerza de trabajo dinámica, y nuestros empleados reflejan la rica diversidad de la ciudad de Nueva York, y de los EU”, detalló el comunicado.
La empresa insistió en que el video sea retirado, ya que según dijo Suzanne Chou, abogado de Koi Grupo, a The New York Times era engañoso.
“Nuestra empresa sigue la ley, y si eres elegible para trabajar en Koi, puedes aplicar”, aseguró Chou.
Este pedido ha avivado más el debate. Aca se niega a hacerlo, pese a las acciones legales que puedan entablar contra él o el director del mismo, Chase Whiteside.
Al hacer los medios estadounidenses, tanto en español como en inglés, eco del video, el joven defendió su postura.
“Trabajo en el restaurante que queda en uno de los hoteles que queda en Soho, nadie (en el restaurante) es empleado de Trump”, dijo el mexicano a Univision.
“Me considero indocumentado porque por ahora sólo estoy en el programa de Acción Diferida que puede acabar en cualquier momento”, explicó.
El video consiguió este jueves más de 80 mil visitas en YouTube.
Pese a la solicitud, Aca está decidido a mantener el video.
“Han pedido retirar el video pero no creo que se deba hacer porque si se retira es como rendirse. Vamos a tener el video arriba y vamos a luchar y estamos preparados para lo que venga”, advirtió a Univision consciente de que pudiera tener una batalla legal.
“No tenemos miedo de ninguna de las consecuencias porque estamos conscientes de que lo que estamos haciendo es algo bien y que estamos tratando un mensaje que es muy importante para estas elecciones: no todos los mexicanos, o hispanos en general, somos criminales”.
El otro debate que se ha generado es si es o no indocumentado.
Según explicó el abogado Ezequiel Hernández a Univision las dos partes técnicamente tienen razón.
El restaurante porque él no tiene estatus, pero el DACA le da la presencia legal. Por eso, aunque no tiene estatus legal sí tiene los documentos para estar presente legalmente en el país y poder trabajar.
Pero de ahí que él diga que es indocumentado.
“Técnicamente es cierto porque no tiene ningún documento que le dé un estatus”, señala Hernández.
“Muchos dreamers se consideran indocumentados. Es así como yo llegué a Estados Unidos, yo crucé la frontera. Y sólo recientemente recibimos la Acción Diferida en 2013. Son documentos pero es sólo un permiso de trabajo, no es como una residencia o un pasaporte. No puedo ir a México. No puedo salir de este país, no puedo viajar”, aclaró el joven mexicano.
Incluso David W. Leopold , ex presidente de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración, se ofreció, según publicó The New York Times, a escribir una carta de respuesta para el restaurante.
Leopold sostuvo que mientras Aca fue autorizado a trabajar, todavía estaba indocumentado.
Citó la información del sitio web de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos, con la que afirmó que la Acción Diferida no confiere estatus legal a un individuo.
Respalda con fotos su postura
Aca también trabaja desde hace semanas en un proyecto fotográfico en el que muestra a inmigrantes con carteles en inglés en los que niegan los calificativos que Trump les dedicó.
“No puedes creer que alguien que es millonario pueda ser en parte un poquito ignorante y pueda categorizar a un país entero como criminales, violadores y narcotraficantes”, sostuvo al medio hispano.
Con sus iniciativas quiere poner de relieve la realidad que vive una comunidad que, según afirma, es una gran parte de la economía de Estados Unidos.
“Hacemos esos trabajos pequeños que muchos no quieren hacer”.
El mexicano espera continuar con su empleo en el restaurante, aunque admite que tiene miedo.
Concluyó que lo que suceda en el aspecto laboral y sus opiniones sobre Trump las publicará en su página de Facebook.