CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Desde hace tres años el comercio informal proliferó al grado de saturar hospitales, tiendas departamentales, instancias de Gobierno, incluso, un sinnúmero de calles en la Capital.
Para el regidor Eugenio Carlos Diez Gutiérrez Navarro, este tipo de comercio informal, salvó económicamente a miles de familias de la crisis que generó la falta de empleo y la inseguridad, al grado que hoy día, se desconoce el total de la cantidad de estos negocios, pues uno nuevo nace cada día.
Esta situación, hoy se traduce en carretones de tacos, de “hot-dog”, de aguas frescas, comida corrida, verduras, juguetes, y hasta artesanías por doquier, y viene a resarcir la falta de empleo en la Ciudad, hasta ayer, poco atractiva para la inversión.
«Aunque sea todo lo contrario a un indicador de progreso, esto vino a convertirse en un salvavidas para cientos de familias que perdieron sus empleos ante las distintas crisis generadas», aseveró.
Dijo que en la actualidad, sigue proliferando, pues cada día, vemos en banquetas y domicilios nuevos puestos de oferta de comida, aguas frescas, ropa usada.
Y es que, desde el 2013, la pobreza extrema creció de 8 mil 500 a 12 mil, y esto es un indicador negativo derivado de la falta de fuentes de empleo, que alberga también el éxodo desde comunidades rurales a la Capital.
Doña Juana Martínez, tiene poco que se asentó en el Hospital Infantil porque su esposo, albañil, no había «agarrado chamba».
