Terminado su trabajo como legislador plurinominal Marco Antonio Bernal amenaza con irse a vivir a Ciudad Victoria, en sus declaraciones a un medio en Nuevo Laredo anunció que ya tiene “una casita” en la capital tamaulipeca y que desde ahí hará trabajo para el PRI estatal.
Y como siempre insiste en su cercanía con el actual dirigente del PRI nacional, afirma que éste será quien le haga algunas recomendaciones para permanecer en tierras tamaulipecas, lo que de paso le servirá avivar las relaciones con los habitantes de la entidad para que por lo menos lo reconozcan en las calles, porque a estas alturas Marco sigue tan lejano de su terruño que necesita un buen periodo de tiempo para que lo identifiquen.
Ese anuncio complementa lo que ha venido repitiendo especialmente desde que su amigo fue asignado a dirigir al priísmo mexicano, lo que sin duda, ¿para qué negarlo?, lo pone en una situación de ventaja respecto a la larga lista de aspirantes a la candidatura del tricolor para la gubernatura.
Esa insistencia de Marco Bernal en gobernar el estado, está siendo seguida con lupa, por ejemplo este miércoles Mercedes del Carmen Guillén Vicente se dejó ver en un recorrido turístico por Tampico.
Ramiro Ramos Salinas, anda dando mensajes informativos a todos los que lo quieran escuchar sus logros como presidente del Congreso local.
En el caso de Marco Bernal fue cuestionado por el medio nuevolaredense cuando se puso a alabar la situación que se vive, asegurando que se ha hecho buen trabajo, pero tuvo que recular al admitir que los problemas de inseguridad continúan en la entidad.
Y para muestra un botón, en su ciudad natal el ex alcalde priísta Alfonso Sánchez Garza denunció que el miércoles intentaron asaltarlo varios individuos “armados con fusiles de asalto”, dice una nota periodística, pero evitó el atraco acelerando su vehículo y refugiándose en su casa.
Inmediatamente el ex edil acusó sin decirlo a la alcaldesa panista Leticia Salazar por la ola de inseguridad que hay en su ciudad.
De resultar cierto el incidente, es raro que el ex munícipe se haya ido a refugiar a su domicilio para escapar de los presuntos asaltantes, cuando algo así sucede en lo último que se piensa es en guiar a los delincuentes al domicilio, lo que se busca es evadirlos y, si se confía en las autoridades, denunciar los hechos. Digo.
Además es sintomático que cuando empiezan las y los encuerdados a buscar los reflectores de los medios, haya aparecido el ex alcalde de quien no habíamos oído ni una palabra desde hace mucho tiempo.
Ésos son los tiempos y las artimañas de los políticos.
NADA QUÉ CELEBRAR
Organizaciones civiles realizaron una marcha este miércoles por la avenida Reforma cuando se cumplen once meses de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
El llamado también es para no asistir en las celebraciones del Grito de Independencia a ninguna plaza pública, incluído el Zócalo de la Ciudad de México para mostrar su repudio a la inseguridad que priva en el país.
AGRESIONES CONTRA LA PRENSA
Mientras en México 80 periodistas han sido asesinados desde el sexenio de Felipe Calderón y casi una veintena permanecen desaparecidos, muchos de los cuales son originarios de Tamaulipas, en Estados Unidos en dos días se presentaron dos ataques contra comunicadores.
Uno en la persona del aspirante republicano Donald Trump, contra el periodista Jorge Ramos y este miércoles el asesinato de una reportera y su camarógrafo.
Malos, muy malos tiempos para el periodismo en general, bajos sueldos, compra de conciencias, ley mordaza, intimidaciones, asesinatos, algo está pasando en el mundo porque al matar y agredir a periodistas se daña a la sociedad entera.
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