1.- La Comisión Federal de Electricidad continúa implacable y atacando los bolsillos de los ciudadanos y con unas tarifas feroces y un servicio pésimo, afecta no sólo a la deteriorada economía de las familias, sino también los costos de toda la actividad productiva.
2.- A partir del desgarriate que provocó el presidente Felipe Calderón con la liquidación de la Compañía Luz y Fuerza del Centro, han tenido que recurrir a una despiadada e inmoral elevación de las tarifas eléctricas, a fin de reponer los millones de pesos que malgastaron en un conflicto que aún no termina.
3.- La Comisión Federal de Electricidad es el peor ejemplo de empresa pública que ha existido en nuestro país, pues desde sus orígenes ha sido “caja chica” del Presidente de la República, madriguera del contratismo, el nepotismo, el tráfico de influencias y de todos los delitos del México corrupto, sin que halla cambiado un milímetro en el Gobierno actual.
4.- Lo anterior me recuerda las numerosas hazañas de corrupción que se han cometido en la citada CFE y que la quebraron hasta llevarla a su actual desgracia financiera. Desgracia que hoy trata de resolver atacando los bolsillos de los pobres, para reponer lo que los “peces gordos” le robaron.
5.- Quién no recuerda al famoso “Paco” Pérez Ríos, que durante muchos años fue líder del Sindicato Nacional de Electricistas y que tenía una cuadra de finos caballos en el Hipódromo de las Américas que le pagó la CFE y cuya mesa en el pomposo “Jockey Club” estaba situada junto a la de los millonarios Justo Fernández y Emperatriz Carbajal.
6.- Muchas tardes de sábado, en que había carreras de caballos, el corrupto “Paco” compartía su mesa de Jockey con Gonzalo N. Santos, el cantante Javier Solís y el abogado Bernabé Jurado. Sus caballos trotaron en los mejores hipódromos del mundo y todos viajaban en aviones pagados por la Comisión Federal de Electricidad. “Paco” fue el “Divino Maestro” que inspiró a viejos campeones de la corrupción como el “Chava” Barragán, la “Quina” y el “Trampas”.
7.- A la mitad del sexenio de Luis Echeverría, llegó a la CFE como Director General el frívolo de José López Portillo y su primer acuerdo con el Tesorero de la Comisión fue nombrar a su hermana Margarita como Superintendente en Jalisco y a quince sobrinos suyos como secretarios auxiliares de la Dirección General. Todos fueron asignados con altos sueldos, compensaciones, viáticos, automóviles, choferes, ayudantes, jardineros para sus casas y viajes al extranjero.
8.- Por esas fechas, el Tesorero de la CFE, licenciado FranciscoSerrano Migallón, muy consternado me dijo: “Le informé al licenciado López Portillo, que la Comisión estaba quebrada, pero se burlo de mí y carcajeándose me contestó que la Comisión había nacido quebrada y que acordaría un aumento de tarifas para tapar los hoyos y nivelar las finanzas”. El pueblo aguanta todo. “Paco, no te preocupes” me dijo y concluyó muy satisfecho el acuerdo.