BRASILIA, Brasil.- El Gobierno de Dilma Rousseff cometió crímenes en el manejo de cuentas fiscales y debe caer para que Brasil retome el orden jurídico.
Así lo afirmó ayer el abogado Helio Bicudo, uno de los impulsores de un nuevo pedido de juicio político contra la Mandataria, esta vez por supuestas irregularidades fiscales en su segundo periodo presidencial.
“Rousseff ya no gobierna, va tomando decisiones según los acontecimientos y un Gobierno sin norte es muy malo”, dijo ayer Bicudo.
De 93 años de edad, y fundador del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), el jurista fue acompañado por Miguel Reale, uno de los abogados más reconocidos del país, y el Partido Social Demócrata Brasileño (PSDB) en la presentación de la denuncia, que será oficializada hoy en la Cámara de Diputados.
El nuevo pedido se suma a otros dos presentados previamente y que se fundamentan en las maniobras fiscales realizadas por el Ejecutivo en 2014 para maquillar sus balances.
Hasta ahora, el presidente de la Cámara de los Diputados brasileña, Eduardo Cunha, ha rechazado once pedidos para procesar a Rousseff, al carecer de las razones jurídicas exigidas por la Constitución.
Pero Bicudo y compañía creen que la nueva acción sí las reúne.
El jurista también fue muy cercano al ex Presidente Lula da Silva, antecesor de Rousseff, a quien hoy dice considerar un farsante.
Da Silva testificó ayer ante fiscales federales que investigan acusaciones en su contra por tráfico de influencias.
Las pesquisas se centran en los viajes que Lula hizo a varias naciones en desarrollo después de dejar la presidencia.
Los fiscales averiguan si el ex Presidente recibió pagos para influenciar a líderes extranjeros para concederle contratos inflados a la constructora brasileña Odebrecht, y si presionó al banco estatal de desarrollo de Brasil para que le diera a la compañía préstamos con intereses bajos.