LO CLARO: Bien y de buenas.
El reciente anuncio hecho por la autoridad, en el sentido de que la Ronda Uno de la adjudicación a empresas privadas para la exploración y fructificación de los recursos petroleros recién concursados, dio lugares extraordinarios a los mexicanos.
Al menos cuatro empresas tamaulipecas han dado cuenta de mejores propuestas para hacer del sector energético, un banco de oportunidades de crecimiento a los mismos mexicanos.
Dentro de los proponentes, el tamaulipeco Ramiro Garza Cantú, será uno de los asignados a la participación y contribución que permita la generación de oportunidades de crecimiento de connacionales.
La velada angustia de ser ocupados en su gran mayoría por capitales extranjeros, se disipa con la certeza que hay posturas y empresas de gran calado entre los mexicanos.
Tres compañías extranjeras resultaron adjudicadas por sí solas en algunos campos y dos más, en sociedad con pares mexicanos.
LO CLAROSCURO. Su poderío novohispano, quedó clarificado con la entrada del Ejército Trigarante, en 1821. El primer regente de la historia, lo fue el mismo emperador Agustín de Iturbide, en el mismo año.
El Distrito Federal, con sus 220.6 km2 sufriría las múltiples interpretaciones políticas de los mandatarios de la nación, que le condicionaban a ser nombrada la Ciudad de México, donde daba asiento a los poderes de la Unión, pero con estricta dependencia a éstos y ser nombrada entonces, como Distrito Federal (1824).
La administración territorial y política, ha transcurrido por la figura de Gobernadores del Distrito Federal (1857), Jefe del Departamento Central (1941), regente (hasta 1993) donde todas esas investiduras, eran nombradas plenipotenciariamente por el Jefe de la Nación.
Hoy se le llama de nueva cuenta, Jefe de Gobierno del Distrito Federal. Y al territorio que gobierna –ya mediante elecciones libres- ha entrado a una independencia inédita.
El Pleno del Senado de la República, mediante el consenso de 74 votos en favor y 20 en contra, se pronunció por otorgar la independencia política a la Ciudad de México, y que en la virtual soberanía, forme ahora parte integral de la Unión de Estados, como una entidad más, sumada a las 31.
Muchos asegunes quedan en el tintero, a lo que los opositores manifiestan su inconformidad –razonable-. Pues la ‘independencia’ no los hace tal, del presupuesto de la federación.
Gastos superiores que ejercen los demás estados, como la inversión en Educación y Salud, correrán a cuenta y costo del erario federal.
Y las quejas en contrario, serían que demuestre su coparticipación al gasto federal, aportando en la misma proporción los ingresos fiscales a que contribuyen las demás entidades.
Los subsidios que recibe actualmente, de entrada… subirán; por su condición de capitalidad; un activo que le retribuye dividendos especiales y que deja en desventaja de recursos a los otros 31 estados.
Sin embargo, será un buen comienzo, en aras de que busque la productividad y aliente a la participación económica en su propio esfuerzo.
El transporte público de la ciudad de los palacios, aún recibe estímulos especiales que obtiene de financiación por ser parte de una Unión.
Hoy, dejaremos de ser “Unión de Estados” y nos llamaremos Unión de Entidades Federativas.
Bien, por manifestar su poder de autonomía. Y todo poder, también implica responsabilidades. Como hacer mayores aportaciones contributivas de sus más de 8 millones 944 mil habitantes.
COLOFÓN: Me comentó en alguna ocasión mi hijo universitario “He estado pensando seriamente en independizarme. En irme a vivir a un departamento. Quiero empezar mi vida. ¿Me puedes financiar por unos años mi independencia?” Aún me duele el estómago… efectos secundarios de la risa.
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