Personal jubilado del gobierno de Veracruz aún está en espera de que le paguen su aguinaldo y el salario correspondiente a diciembre, tras de que la remuneración del mes pasado se les pagó con más de dos semanas de retraso. Integrantes del grupo policiaco “Fuerza Tamaulipas”, tuvieron que hacer un paro en demanda de que se les cubran viáticos pendientes por varios meses. Empleados de varias dependencias federales en Tampico suspendieron sus actividades ante la demora en el pago de sus aguinaldos y otras prestaciones.
¿Qué es lo que está pasando? Que el gobierno, en sus distintos niveles, se ha convertido en el peor patrón que no es capaz de cumplir con las obligaciones que le marca la ley y que con ello demuestra que en materia financiera el sector oficial está en la calle, pese a los festivos anuncios de que la economía mexicana está en bonanza. Todo eso es pura saliva.
En el caso de los pensionados veracruzanos, es tal el desprecio que el gobierno estatal muestra hacia ellos, que ninguna autoridad sale a dar una explicación a los afectados, pese a las movilizaciones de protesta que recientemente se efectuaron en varias ciudades de la entidad. El gobernador JAVIER DUARTE se mantiene en su castillo de oro sin que le importe la suerte de quienes trabajaron por más de 30 años antes de lograr merecidamente su retiro. Ni los multimillonarios préstamos que su administración ha pedido bastan para cubrir los despilfarros de este y el anterior gobierno de FIDEL HERRERA BELTRÁN.
En el caso de los policías de “Fuerza Tamaulipas”, la pregunta que de inmediato surge es ¿con qué ánimo esos gendarmes van a cuidar la seguridad de la ciudadanía cuando ellos no tienen ni para comer? La seguridad es el principal renglón que desde el sector oficial se dice estar atendiendo, pero ¿cuál puede ser el resultado
si a los encargados de mantenerla en las calles se les regatean los pagos que legítimamente les corresponden?
¿Acaso la autoridad quiere que, en base a sus necesidades urgentes, los policías se vean orillados a aceptar dádivas de la delincuencia organizada para llevar el sustento a sus familias? Esto equivaldría a fomentar la corrupción desde las mismas esferas gubernamentales.
El presidente ENRIQUE PEÑA NIETO dijo ayer en un discurso que “para lograr un país con tranquilidad cada corporación policiaca, federal, estatal o municipal debe estar a la altura de sus responsabilidades”. ¿Y acaso el gobierno está a la altura de las suyas? ¿Sabrá el mandatario que a los policías de la fuerza emergente en Tamaulipas dejaron de pagarles sus viáticos por varios meses? Claro que no, él también vive en su castillo dorado donde la realidad no existe.
¿Estará enterado el presidente que empleados de la baja burocracia federal tuvieron que declararse aquí en huelga en demanda del pago de sus aguinaldos? Eso no parece ser un asunto de su incumbencia. Que se frieguen los jodidos, mientras que la primera dama compra un mansión de 80 millones de pesos.
Y ante todo esto, los diputados federales y locales nada dicen. Ellos ya recibieron sus jugosos sueldos y bonos. Ellos igualmente viven en un paraíso pagado por los contribuyentes.
En promocionales radiofónicos, la Secretaría del Trabajo afirma que el aguinaldo es una prestación que obligatoriamente deben pagar los patrones. Pues debería echar un vistazo al interior de su propia casa para que vea quién es el principal omiso en este asunto. Es increíble que el ente responsable de velar por la seguridad pública y de que se cumplan las obligaciones laborales, resulte ser el peor patrón. Por eso estamos como estamos.
Pero mientras algunos segmentos sociales se debaten en la incertidumbre, la carrera por alcanzar los cargos de elección popular que estarán en juego el año próximo, está en su apogeo.
En Tamaulipas los aspirantes a la candidatura priísta al gobierno del estado siguen con el acelerador a fondo aprovechando de paso las fiestas decembrinas. La mayoría de ellos han organizado “posadas” como medio de atraerse simpatías o simplemente darse a conocer. Saben que el momento de la gran definición se acerca.
El jueves por la tarde el grupo “Amigos de Álvaro” celebraron un jolgorio navideño en las canchas gemelas de la colonia INFONAVIT en la que el principal invitado fue MARCO ANTONIO BERNAL GUTIÉRREZ, que parece estar entre los finalistas de la competencia. Se nota que ÁLVARO GARZA CANTÚ, al igual que lo hizo hace 19 años, apoya con todo a su amigo. Días antes, también el mantense ALEJANDRO GUEVARA COBOS ofreció piñatas a colonos de Altamira y Madero. Pero su capital político parece estar muy lejos de que se necesita para ser el ungido.
Mientras tanto, otro prospecto, el actual alcalde ALEJANDRO ETIENNE LLANO, está apretando el “sprint” y está a punto de colocarse a la cabeza de la competencia, mientras que el matamorense, BALTAZAR HINOJOSA OCHOA, que parecía ser el favorito para ganar, se está rezagando, tal vez por algunas acalambradas que le han dado.
Y para que se vea cómo surgen aspirantes por todos lados, ahora el ex-alcalde de Altamira, PEDRO CARRILLO ESTRADA, dice que le gustaría ser candidato tricolor a la diputación local por ese municipio. Solo falta que GENARO DE LA PORTILLA se aviente nuevamente al ruedo.
raulpazos45@gmail.com




