Para nada: la campaña de la Red Nacional de Juicios Orales, que busca la colegiación obligatoria, tiene como objetivo mejorar la capacitación y la ética de los abogados. No persigue fines políticos para los Colegios de Abogados o sus líderes, ni beneficios económicos; apropiadas normas jurídicas, que salvaguarden estos riesgos, bien pueden implementarse.
¿Guatemala en México? Que el Colegio Nacional de Abogados de la República vecina haya logrado la renuncia del Presidente en turno, precisamente por corrupción, no puede tener como consecuencia que México, como país, no haga lo necesario para mejorar los estándares profesionales de los Licenciados en Derecho.
Aurelio Nuño y Humberto Castillejos encabezan una Contra-Reforma a los Juicios Orales, al oponerse a discutir la manera de subsanar las deficiencias de abogados privados.
¿Piensan que si no pueden controlar al Sindicato de Maestros, y otros más de una larga lista, menos podrán con los “Letrados” Unidos? ¿Otra vez fines políticos, en este caso mal entendidos, se anteponen a políticas públicas?
Con este boicot ¿quieren que la situación caótica de abogados continúe como hasta ahora?
En México se suman 3 escuelas nuevas de Derecho, cada semana, a las más de 1,700 autorizadas, indistintamente, por la SEP, las 32 Entidades y Universidades.
De los 300,00 titulados, menos de 10,000 pertenecen a alguno de los casi 200 disque Colegios que hay; ningún de ellos, ni la misma SEP, ha revocado una licencia por falta de ética.
¿Blancos todos los leguleyos en un sistema de corrupción generalizada? No, ausencia de control de la profesión, sí.
El nuevo sistema de procedimientos penales ha quitado el velo: los abogados privados, en general, están mal capacitados para enfrentarlo; en cambio, los defensores públicos, por esfuerzo grupal, han podido prepararse mejor.
Los nuevos juicios penales con llevan cambios igualmente trascendentales en temas que son su basamento: Policías, Crimen Organizado, Anti-Corrupción, Cárceles limpias, Justicia para Adolescentes, Víctimas y, desde luego, Colegiación Obligatoria.
Están pendientes en el Congreso, irresponsablemente, estas leyes a pesar de que son condición sine qua non para el éxito de la Reforma Penal y de que la sociedad civil ha presentado iniciativas ampliamente consensadas.
En adición del Presidente de la República ¿quién es responsable en el Gobierno de impulsarlas? No solo no lo están haciendo, sino que quitan presupuesto a capacitación y equipamiento de Policías, por ejemplo, indispensable para echar a andar el nuevo sistema.
¿Cómo nos imaginamos van a reaccionar los votantes en tres años, ahora que el tema de cumplimiento del Derecho toma rango de prioridad electoral?
¿De qué sirve el esfuerzo diario de los mexicanos para mejorar, si sus bienes, libertad y su propia vida, son vulnerables por procedimientos penales no confiables?
El “Momento México” vendrá cuando todos cumplan las leyes en el país.