CHIHUAHUA, Chihuahua.- México cubrió en su totalidad la deuda de 324.7 millones de metros cúbicos de agua del río Grande que tenía pendiente desde el año pasado con Estados Unidos.
José de Jesús Luévano, secretario de la Sección Mexicana de la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos, informó en entrevista que la deuda se acumuló durante el último ciclo de cinco años de entrega de agua, el cual finalizó el 24 de octubre del 2015.
“El pasado 25 de enero de 2016 se cubrió totalmente este faltante, es decir, México en este momento no tiene ningún adeudo de agua con Estados Unidos en los términos del Tratado de Aguas de 1944”, explicó.
“En contrapartida, Estados Unidos nos entrega mil 850 millones de metros cúbicos de aguas del río Colorado que se utilizan básicamente en el noroeste de Sonora y para todo el Estado de Baja California”.
Conforme al Tratado de Aguas de 1944, México tiene la obligación de entregar a Estados Unidos 431.7 millones de metros cúbicos anuales pero que se contabilizan en ciclos de cinco años de tal manera que, la obligación final, es entregarle 2 mil 158 millones de metros cúbicos.
El 24 de octubre de 2015 inició un nuevo ciclo de cinco años entre México y Estados Unidos, el cual concluirá el 24 de octubre de 2020.
Luévano destacó que el Tratado de Aguas de 1944 es un instrumento que fortalece la relación bilateral en el reparto del agua.
“El Tratado nos da suficientes herramientas para prevenir fenómenos como sequías, por eso en el caso de México no se obliga a entregar puntualmente esos 431.7 millones de metros cúbicos anuales, si bien lo establece como una obligación anual, México puede entregar el primer año 250 millones de metros cúbicos y luego otro tanto para compensar con la meta de que al concluir un ciclo, si termina con un faltante, que éste sea manejable como ocurrió en este caso”, agregó.
Por otro lado, la Sección de los Estados Unidos de la Comisión Internacional de Límites y Aguas destacó la cooperación que existe entre Estados Unidos y México para satisfacer las necesidades hidrológicas de ambos países.
“Las deudas de agua son en ocasiones inevitables, pero todos los propietarios de agua a lo largo de nuestra frontera común deben contar con notificaciones anuales de cuánta agua pueden esperar recibir en el año próximo para así poder realizar la planeación correspondiente”, indicó a través de un comunicado.