Macedonia envió de regreso a Grecia a unos mil 500 migrantes que cruzaron la frontera común en un intento desesperado por seguir su viaje hacia el norte de Europa, tras permanecer varados por semanas en el cruce griego de Idomeni.
Alrededor de dos mil inmigrantes lograron cruzar la frontera entre ambos países e introducirse en Macedonia la víspera, después de romper la malla de separación y cruzar a través del río Suva Reka en un punto cercano al oeste del campamento de refugiados.
El Ministerio macedonio del Interior informó que la mayor parte de los migrantes fueron detenidos durante la noche en el pueblo de Moín, cerca de la frontera, y devueltos a Grecia este martes junto con otros 600 contenidos por los guardias en la frontera.
Señaló también que junto con los migrantes detuvo a 72 periodistas extranjeros y voluntarios que iban con ellos, quienes fueron puestos en libertad después de pagar una multa por entrar ilegalmente a Macedonia y enviados a Grecia.
Autoridades señalaron que los inmigrantes habían sido engañados por personas no identificadas que distribuyeron panfletos para guiarlos hasta un punto en la frontera sin vigilancia, a casi cinco kilómetros del campamento de Idomeni.
Con información de MVS