CIUDAD MADERO, Tamaulipas.- El último reporte suma 27 mil asistentes al playazo y 5 mil 400 autos en la zona de costa del centro de recreación pública.
En los altoparlantes no predomina el reggaeton que suele acompañar los encuentros de jóvenes, ni los melodiosos beat’s de Justin Bieber . En cambio la música es regional mexicana-banda, norteñas y uno que otro despistado con rock de los noventas.
Al playazo asisten pocos, muy pocos jóvenes. El evento simula un encuentro de nostálgicos montados en automóviles recién salidos de agencia. Hay niños acompañados de sus padres en vehículos deportivos con música a todo volumen.
Los jóvenes se encuentran dispersos, son pocos. Serán pocos en lo que resta de la jornada.
Las unidades familiares realizan los recorridos a través del bulevar Costero, con padres de familia como conductores.
Las instituciones de educación media superior optaron por cancelar las clases y esto provocó que el número de ‘pinteros’ disminuyera sustancialmente.
La edad promedio de los asistentes es de más de 25 años y hasta los 50 años de edad.
«Vengo a la playa, saliendo de la chamba, porque quede de verme con unos amigos, como desde hace muchos años lo hacemos», dijo Oscar Gabriel Díaz, trabajador de Pemex.
El hombre recordó que hace una década el lugar era frecuentado por los estudiantes de todos los niveles, como él, entonces alumno de la carrera de comunicación en la UAT.
La zona de playa, comenta Mario Alberto Marín Hernández, se dividía en la zona para los estudiantes de la UAT, del Tec de Madero, y de las instituciones privadas que se sumaban en el festejo.
En 2016, las áreas que ocupaban comúnmente los estudiantes de las escuelas de carácter privado lucen desoladas. El fenómeno social pasa desapercibido.
Por la mañana, l inicio es flojo, sólo el sonido que provoca el vaivén del mar acompaña a los pocos automóviles y menos jóvenes, que transitan por el bulevar Costero de Playa Miramar, poco después de las 10. La zona costera de playa Miramar reporta una afluencia inferior a los 500 visitantes.
Los tres estacionamientos lucen vacíos, en especial los ubicados en la zona norte del centro público.
Apenas pasa la una de la tarde, y el fenómeno social suma con apuros mil 500 paseantes,reporta la oficina de Protección Civil de Ciudad Madero.
Roberto Chavez Ortega, director de la dependencia advierte en ese momento que esperan sumar 25 mil al término de la jornada.
Aún así, la cifra prevista es inferior a los 27 mil que registró en 2015.
El funcionario advierte que hay reportes de que a través de la Avenida Rodolfo Torre Cantú el flujo vehicular muestra un aumento paulatino.
Las condiciones del clima favorecen a que en el transcurso de la tarde se incremente el número de jóvenes en playa Miramar.
Por la noche, la afluencia mejora con una cifra de 20 mil personas, hasta las siete la noche.