CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Previniendo la problemática que se avecina, la Secretaría del Ayuntamiento prepara un operativo de monitoreo y orientación a los cientos o quizá, miles de unidades que circularán durante cinco días por el libramiento hacia la carretera vieja a Tula, desviados ante el cierre de la carretera Rumbo Nuevo, a causa del paso de las calderas.
Rafael Rodríguez Salazar, secretario del Ayuntamiento, reveló que se montará un dispositivo de 15 elementos viales desde los entronques de la carretera, a lo largo del libramiento Naciones Unidas, hasta la salida vieja a Tula, con lo que se pretenderá controlar el tráfico.
Actualmente, la carretera Rumbo Nuevo, es la rúa más práctica y viable para acceder de Tamaulipas hacia el centro del país vía San Luís Potosí, y por la misma circulan, de acuerdo a un sondeo de Tránsito, alrededor de 10 mil vehículos diariamente, entre estos, de carga pesada.
Rodríguez Salazar dijo confiar en el manejo que se dé al tráfico, para evitar accidentes y descontrol en todas estas áreas.
Por otra parte, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes anunció que sería hasta el próximo día 22 el arribo de las calderas a la carretera Rumbo Nuevo, por lo que podría orientarse todo el tráfico de esa carretera a esta ciudad.
