La derrota del PRI en Tamaulipas, ni duda cabe, tiene nombre y apellido, pero eso nadie lo quiere decir porque sería tanto como trasladarnos a las
más altas esferas políticas nacionales donde se cocinan las grandes decisiones; allá donde se dice quién es y será el próximo gobernador y donde se manejan todos los canales habidos y por haber en estas cuestiones, razón por la cual les digo ni para cuando a los viejos tiempos cuando desde muy arriba se daba contra viento y marea una orden para sacar a como diera lugar al “bueno” y así se hacía. Hoy, es bien cierto, faltó decisión y participación del alto mando.
Entregaron Tamaulipas en mazorca y que no nos cuenten las muelas porque nadie lo va a creer así.
Pero también el pueblo priista, quien vota y da el triunfo al favorito, calló y aceptó la orden sin chistar cuando antes era incapaz de aceptar una derrota como la de hoy?
Porqué, pregunto, los líderes tricolores de mi pueblo están callados y ni siquiera convocan a su militancia a una reunión para que expliquen qué fue lo que realmente pasó?
¿Dónde están los delegados del PRI que hoy no se paran por Llera?
¿Porqué una alianza política entre el PRI, Verde Ecologista y PANAL cuando no era necesaria?
¿Faltó liderazgo u apoyo político?
¿Faltó puño?
¿Faltó dinero o se lo clavaron?
¿Porque ningunearon a la prensa en general?
En fin hay muchas preguntas por hacer y quienes
manejaron esta cuestión solo responden “el pueblo nos falló”.
Pero ¿por qué?
Pronto, una vez que pase la turbulencia política se sabrá el por qué y dónde se gestó la idea de entregar Tamaulipas a la oposición, pero lo mejor será saber porque lo hicieron y quienes fraguaron la derrota de la coalición PRI, PANAL, Verde Ecologista.
Hoy el pueblo tricolor está dolido y no alcanza a medir las consecuencias de su derrota, no se la explican y esto va a calar hondo a futuro.
La última pregunta que resta por hacer es, al menos en Llera, ¿por qué si todos decían vamos bien, porque entonces perdieron la plaza?.
¿Qué faltó o falló?
Eso pronto se sabrá y se sabrá también quienes fueron los grandes traidores.
Una cosa si les digo, el delegado tricolor falló en su trabajo de proselitismo político, hubo mano negra o hubo exceso de confianza o hubo vendimia política, todos estos
cuestionamientos saldrán a luz pública dentro de muy poco.
Por lo pronto así la dejamos de este tamaño.
Y mientras todo esto ocurre o está por venir, Héctor de la Torre Valenzuela, quien fuera candidato independiente y hoy virtual ganador como próximo presidente municipal se reúne con su gente, construye y organiza el equipo de trabajo con el que habrá de gobernar los próximos dos años y no les miento si les digo prepara su reelección, pues la ley electoral así se lo permite por tres años más.
Por lo tanto está obligado a realizar un buen trabajo administrativo y no lo duden que lo hará, pues el “sapito” como así le dicen y gusta lo llamen la va a “pelear”, y para eso ya prepara su segunda vuelta, se rodea de gente que le ayudará a salir adelante y garantice su retorno a la esquina del poder.
Ahora la pregunta de cajón es, y, ¿el PRI a quién lanzará?. Creo es tiempo que los tricolores se pongan trabajar, busquen la unidad para sacar desde ahora su mejor carta porque Héctor será un gallo difícil de pelar dentro de veinticuatro meses.
HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE.