Una vez transcurrido el huracán azul, es pertinente serenarnos y analizar detalladamente, el nuevo reacomodo político del país, de manera particular, la correlación de fuerzas que ahora se dibujan con nitidez en Tamaulipas.
Es cierto, el PAN con Francisco García Cabeza de Vaca, tiene el control del Ejecutivo y del Legislativo, éste último pieza clave, para operar los cambios necesarios en su gobierno, y emprender las investigaciones que el nuevo mandatario, juzgue pertinentes, lo cual a decir de muchos, lo legitimaría. Sin embargo, para efectos estratégicos, el PRI sigue controlando el presupuesto federal, desde la Secretaría de Hacienda y desde el palacio de San Lázaro.
Lo que viene ya en los próximos meses, es un juego de vencidas entre los nuevos gobernadores panistas, y la presidencia peñista. ¿Harán uso de una CONAGO? En el caso específico tamaulipeco, tendremos en el altiplano una bancada de diputados federales tricolores frente a un legislativo local, de color azul. En ambos aflorarán desde luego, las tendencias e intereses políticos, de los partidos y de sus grupos.
Por eso, suena demasiado ligera la declaración del dirigente nacional del PAN Ricardo Anaya, cuando señala que todos los gobernadores salientes serán llevados a juicio. Esto último, sí se va a dar, por supuesto que ocurrirá, pero solamente en los casos en que, el mismo gabinete peñista decida dejar solos a quienes, desde Los Pinos, juzguen que les fallaron.
A partir de esta realidad, ya desde ahora debemos preguntarnos: ¿A cuántos ex mandatarios estatales el gobierno de la república, les quitará el blindaje político, y los dejará a la deriva, para que sean devorados por la manada de tigres azules, surgidos en el 2016..?
En los hechos, el PAN está entrampado entre su discurso de las campañas reivindicatorias que lo llevaron a capitalizar el hartazgo, y la nueva realizad política, donde ya en su carácter institucional, están obligados a “presentar trabajo”.
Como en el caso de la novela de García Márquez, “Crónica de una muerte anunciada”, una de las entidades federativas, donde ya hasta el nuevo gobernador panista, le puso fecha para llevar a la cárcel a su antecesor Javier Duarte, es el estado de Veracruz. El mandatario jarocho, es la pieza ideal para que el sistema político mexicano, se reivindique ante el mundo, en cuanto a dar un golpe mediático contra impunidad. Digamos que el gordito Duarte, es el prototipo unificador de criterios, tanto locales, como federales, para ser llevado a juicio, sin mayores contemplaciones.
Pero…¿solo será Duarte? ¿Será éste el único ex gobernador ajusticiado por la nueva realidad panista? Desde nuestro punto de vista, ya desde ahora, el grupo del poder federal en Los Pinos, incluyendo al mismísimo Beltrones, estarían analizando la famosa lista negra que podría ser arrojada a los leones de la oposición.
Recuerden que, por más que se puedan pelear, el PRI y el PAN, a niveles cupulares, siempre han sido hermanos gemelos de un modelo económico que, a partir del 2018, ambos defenderán con uñas y dientes, ante la auténtica izquierda lopezobradorista. En este sentido, es muy seguro que, entre ambos partidos, decidirán que ex gobernadores serán presentados como ejemplo de lo que no se debe de hacer.
¿Cuántos castigados habrá? Enrique Peña Nieto y Ricardo Anaya, tienen la palabra.
UNA POTENCIAL BUROCRACIA, SE DECLARA LISTA, PARA OBTENER EMPLEO
Para aquellos trabajadores de gobierno, que en su momento se dejaron llevar por la emotividad del cambio, hoy tendrán justamente lo prometido: serán relevados por miles de hombres y mujeres, que ya han sido avisados sobre su inminente contratación, en las nóminas del nuevo gobierno. En lo personal hemos escuchado las animadas charlas de ciudadanos de bien, como boleros, taxistas, empleados de mensajería, plomeros, electricistas, que ya tienen un boleto para ingresar a la naciente burocracia panista.
Hace bien Cabeza de Vaca en darle empleo a la gente que más lo necesita, más aun cuando estos son ciudadanos sin partido, que en su momento se la jugaron con él. En su tiempo, el gran general de los ejércitos romanos, Julio Cesar, solía repartir entre sus ejércitos, parte de las riquezas que se habían obtenido en las fragorosas batallas.
A los burócratas priístas, que ya tenían una posición, y que se doblaron y se vendieron, pues no sabemos que les vaya a tocar. Pero, ya desde ahora, sobre todo a los que no tenían base, los van a despedir.
EN NUEVO LAREDO, RIVAS CUELLAR SE PREPARA PARA ASUMIR EL PODER
Producto de una administración municipal que hizo mucho por la gente y dejó una buena impresión ciudadana, como fue la de Carlos Enrique Cantú Rosas, el alcalde electo, Enrique Rivas Cuellar, ha dicho que encabezará un gobierno incluyente. En hora buena.




