CIUDAD DE MÉXICO.- El campo Trión, para el cual el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) aprobó ayer buscar un socio, requiere una inversión de 11 mil millones de dólares en 15 años.
Pemex buscará alianzas o “farm outs” con empresas privadas para desarrollar el campo en aguas profundas del Golfo de México, frente a las cosas de Matamoros, y así explotar los 480 millones de barriles de petróleo en reservas probadas, probables y posibles (3P).
José Antonio González Anaya, director general de Pemex, dijo que el Consejo aprobó iniciar el proceso junto con las Secretarías de Energía (Sener) y de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para encontrar compañías que compartan la inversión y el riesgo con la petrolera.
Indicó que la Sener definirá las características técnicas del contrato y la SHCP el régimen fiscal y las condiciones económicas.
Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía, señaló que en la zona hay petróleo ligero y gas natural, aunque la profundidad para llegar al lecho marino es de casi 2 mil 500 metros, por lo cual el bloque se cataloga como aguas ultraprofundas.
Trión, ubicado en el Cinturón Plegado Perdido, se encuentra a 200 kilómetros frente a las costas de Tamaulipas y a 40 de la frontera con Estados Unidos. Tiene una superficie de mil 250 kilómetros cuadrados.
González Anaya señaló que aún no se ha definido qué participación tendrá Pemex en el consorcio que resulte de esta licitación, pero indicó que para proyectos similares generalmente se forman grupos de tres empresas.
En julio de este año se presentará la convocatoria para participar en esta licitación y se espera que la resolución se dé el 5 de diciembre junto con el concurso para la ronda 1.4 petrolera, que también incluye campos en aguas profundas, pero en lugares en los que hoy Pemex no opera.
Trión lo obtuvo Pemex después de que la reforma energética le permitiera escoger los campos con los cuales quería quedarse la empresa.
El modelo actual de exploración es de asignación petrolera, el cual se migrará a un contrato de exploración y producción bajo el modelo de licencia, donde las empresas podrán quedarse con todos los hidrocarburos a cambio del pago de impuestos y contraprestaciones al estado.