MATAMOROS, Tamaulipas.-Técnico instalador de antenas, fue asesinado supuestamente a golpes luego de correrse parranda con un amigo y su cadáver fue localizado dentro del cuarto que ocupaba en un vecindario del barrio “La Capilla”.
ESTABA EN CHARCO DE SANGRE
El hallazgo de la víctima se realizó alrededor de las 11 de la mañana en un cuartería de la calles Independencia, 12 y 13 del primer cuadro de la ciudad.
En medio de un charco de sangre quedó tirado bocarriba la persona que respondía en vida al nombre de Arturo Treviño de 64 años.
A la escena del crimen arribó la titular de la Agencia Segunda del Ministerio Público para la fe ministerial.
También arribó personal de técnicas de Campo de Servicios Periciales para levantar evidencias que permitan el esclarecimiento del caso.
EL HALLAZGO
La persona que halló sin vida al sexagenario es la propietaria de la vecindad, Micaela Salas Martínez de 76 años.
Ella manifestó que cuando eran las 11 de le mañana se le hizo raro no ver a Arturo Treviño levantado, motivo por el cual se acercó a su cuarto y al abrir la puerta lo vio tirado entre un charco de sangre.
De inmediato dio aviso a las autoridades llegando rápidamente al lugar la Policía Ministerial del Estado, Protección Civil, paramédicos de la Cruz Roja y elementos del Ejército Mexicano, quienes acordonaron la área del supuesto crimen.
SE EMBRIAGABA CON VECINO
Algunos testigos que viven en la misma vecindad, comentaban que otro vecino de nombre Gerardo, quien apenas tiene una semana viviendo en el lugar, estuvo tomando bebidas embriagantes con el técnico durante la noche.
Ya no supieron nada hasta otro días que se alarmaron al percatarse que lo habían hallado sin vida dentro de su habitación.
A simple vista el cuerpo presentaba algunos golpes así como se le apreciaba una herida cortante en el rostro
Arturo Treviño de 64 años, dicen que se dedicaba a instalar antenas y cámaras de vigilancia.
También refieren que sus familiares están en la vecina ciudad de Brownsville, Texas,
La víctima tenía ya 6 años viendo solo en la citada vecindad del afamado barrio “La Capilla”, enclavado en el centro histórico de Matamoros.
Finalmente, el Ministerio Público en turno ordenó que el cuerpo del sexagenario fuera enviado al Servicio Médico Forense para que se practicara la autopsia de ley y conocer a ciencia cierta las causas reales de la muerte.




