1.- A pocos meses de concluir su gobierno, procede subrayar la importancia que el Gobernador, Ingeniero Egidio Torre Cantú le ha otorgado durante su mandato a la construcción de la infraestructura del estado, lo que motivó en el pasado alguna crítica infundada de individuos que carecían de conocimientos sobre la materia, y que desconocían su relevante prioridad.
2.- Por infraestructura se entiende el conjunto de instalaciones y servicios de mantenimiento y enlace, de una economía o región habitualmente sujeta a las determinaciones estratégicas del gobierno de un país. La decisión de establecer ciertas instalaciones en un punto dado, corresponde normalmente a la autoridad pública, pues esta posee una visión general de las necesidades de la población.
3.- La infraestructura comprende, entre otros, los siguientes rubros: carreteras, medios de transporte (ferrocarriles, aviación, transporte público, etc.), energía eléctrica, suministro de agua, drenaje, puertos y telecomunicaciones. Cada uno de ellos posee sus propias peculiaridades en lo que se refiere a la magnitud de la inversión, empleo, ventajas y efectos sobre los sectores económicos.
4.- Sin una infraestructura moderna y eficiente, Tamaulipas se condenaría a si misma al estancamiento, pues carecería de recursos que le son indispensables, no sólo para la integración de los diferentes municipios y regiones que la componen, sino también para su vinculación con los mercados internacionales, y para el mejor aprovechamiento de sus ventajas competitivas.
5.- El gobierno de Egidio Torre Cantú ha prestado gran atención a los asuntos relacionados con la infraestructura, cuya modernización ha constituido un incentivo adicional para atraer nuevas inversiones y dispersar las enormes concentraciones humanas en las grandes ciudades, lo que posibilita un desarrollo regional más armónico y equilibrado. Su propósito ha sido el convertir a Tamaulipas en una gran potencia energética.
6.- No existe a la fecha comunidad popular o campesina en el estado que no haya recibido atención del gobierno, y que no se haya beneficiado de la obra pública. Más del 60% de la obra material fue proyectada y ejecutada en beneficio de los más pobres.
7.- La obra de infraestructura realizada es importante y de beneficio indudable para muchos núcleos de la población, aunque los nostálgicos de las épocas de bonanza y despilfarro siguen añorando aquellos tiempos en que el dinero sobraba, y las obras suntuarias y faraónicas eran delicia de los grandes contratistas.
8.- La obra pública está a la vista de quienes lo gestionaron y hoy la disfrutan. La mayor parte de ella es obra de infraestructura que no se presta para la fotografía o halago espectacular, porque no es obra suntuaria ni de relumbrón. Sólo la valoran las miles de familias humildes que por años la exigieron y cuya voz fue escuchada hasta el presente.
9.- Para el régimen de Egidio Torre Cantú ha sido claro que la nueva tecnología ha revolucionado los usos, los materiales, los costos y la demanda de los distintos elementos de infraestructura, y en especial de los transportes, columna vertebral del desarrollo económico.
10.- Los caminos, carreteras, puentes, edificios, centros de convenciones, vivienda y demás obras públicas construidas durante su gobierno, son la mejor herencia que Egidio Torre Cantú ha dejado a Tamaulipas, para que sus nuevas generaciones sigan creciendo en un clima de progreso, pleno empleo y vida útil y productiva para todos.