CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Tras el segundo derrumbe en cinco días, la carretera antigua Victoria-Jaumave, en el kilómetro 160 más 100, fue declarada no apta para soportar la circulación de miles de vehículos de carga y puede ser un peligro para los automovilistas y choferes, de acuerdo con especialistas.
Debido al cierre de la carretera Rumbo Nuevo para darle preferencia a un grupo de megacalderas, el antiguo camino a Tula será la única ruta para el resto de las unidades.
Ante esta situación, personal de la Policía Federal División Caminos reveló que las fallas que presenta esta carretera, con derrumbes y deslaves, la hacen una vía peligrosa en caso de que se abrirse a la circulación.
Un agente federal explicó que cuando fue cerrada en 2003, la antigua carretera tenía una circulación promedio de mil 500 a mil 600 vehículos por día, mientras los registros de la carretera Rumbo Nuevo rebasan los 2 mil 500 vehículos diarios. Del tráfico total a Tula, el 60 por ciento corresponde a unidades de transporte de carga.
Sin embargo, la vieja carretera no está diseñada para soportar el paso de 2 mil 500 unidades diarias.
DOS DERRUMBES EN CINCO DÍAS
El pasado martes 21 de junio, la Policía Federal informó sobre un derrumbe en la carretera vieja Victoria Jaumave, lo que provocó el cierre de esta vía de comunicación por varias horas, situación que se volvió a presentar este domingo, donde más de 20 toneladas de piedras cayeron en el mismo sitio.
Fue la coordinación estatal de Protección Civil la que informó sobre la avalancha y se encargó de tomar las medidas de prevención para advertir a los automovilistas.
Medardo Sánchez Albarrán, titular del organismo, dijo que el derrumbe se ubicó a 14 kilómetros de ciudad Victoria sobre la cinta asfáltica, donde personal de Obras Públicas y de la SCT iniciaron trabajos de limpieza y retiro de escombro.
El funcionario estatal pidió a los automovilistas utilizar la carretera Rumbo Nuevo como alternativa para viajar al municipio de Jaumave o Tula.
Cabe destacar que esta carretera es utilizada principalmente por motociclistas durante el fin de semana para viajar a la zona del altiplano.
RECOMIENDA SCT NO USAR LA VIEJA VÍA A TULA
La carretera antigua Victoria-Jaumave fue puesta en operación en 1964 y cuenta con 222 curvas a lo largo de 39 kilómetros. En los períodos de mayor tráfico, presentaba hasta cinco accidentes diarios, según informes de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT). Debido a que esta carretera es utilizada actualmente como una vía alterna para trasladarse a Jaumave, tiene muy poco tráfico y se estima una circulación actual de 100 vehículos al día de pobladores de ejidos como Altas Cumbres, el Madroño, las Mulas, entre otros.
Esta vía de comunicación fue utilizada hasta el mes de octubre del 2003, en que fue puesta en operación la carretera estatal Rumbo Nuevo.
Los datos estadísticos indican que por la carretera antigua circulaba un promedio de mil 500 vehículos diarios, de los cuales el 60 por ciento eran unidades de carga pesada y 40 por ciento automovilistas, la mayoría con destino a la región fronteriza.
En sus 39 kilómetros de recorrido, se tiene que ascender a una altura de los mil 820 metros sobre el nivel de mar y su parte más alta se conoce como Cerro de las Mulas.
Sin embargo, al ubicarse sobre la sierra Madre, durante la temporada de lluvias es propensa a registrar deslaves de rocas, como el ocurrido el 25 de octubre del 2015, cuando más de 40 toneladas de roca invadieron la carpeta asfáltica y provocaron el cierre de la carretera durante tres días.
En junio del 2016, esta carretera ya registró dos derrumbes, siendo el más importante el de este domingo, con más de 20 toneladas de roca derrumbadas en la pista de asfalto.
MEDIO SIGLO DE ANTIGÜEDAD
La carretera Victoria-Jaumave no está construía para los modernos vehículos de carga ni para tráfico denso, ya que sus características corresponden a los automotores que existían hace más de 50 años.
Víctor Manuel García Loera, subdirector de Planeación y Vinculación del Tecnológico de Victoria e ingeniero civil con especialidad en Vías Terrestres, explicó que la antigua carretera podría desencadenar en una serie de accidentes si no se toman en cuenta diversos factores.
“Esa sección data desde la mitad del siglo pasado y el trazo está diseñado para los vehículos que en aquel entonces circulaban” dijo.
Alto riesgo
García Loera explica que la peligrosidad de la carretera antigua yace en las diferencias con la rumbo nuevo, ya que para empezar la primera tienen un ancho de 7.50 metros y la otra 12 metros con amplias curvas, lo que la hace más adecuada para vehículos pesados.
«Un camión doble remolque pesa más de 65 toneladas el cual está compuesto por dos secciones de 22.50 metros más el tráiler, y con una anchura de 3.50 metros medidas que pueden desencadenar en un peligro en las más de 70 curvas peligrosas que tiene la carretera vieja, que un vehículo doble remolque hace invadir el carril».
Otro de los factores es la velocidad, ya que por la vieja carretera un automóvil no puede ir a más de 60 kilómetros por hora debido a la pendiente, y un tractocamión, a más de 20, ya que ésta hace cambiar el punto de equilibrio y producir una volcadura.
